lengua amarga
Fecha: 07/11/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: wastedLalo, Fuente: SexoSinTabues
... piel. Cierra el grifo de la manguera y me arroja una pastilla de jabón. Me froto durante media hora. Estoy amoratado de frío. Me castañean los dientes. Ashley finalmente me saca de allí y me lleva a una caseta donde me puedo secar con una toalla limpia y entrar un poco en calor. Ashley me obliga a colocar mis pocas ropas en una pira y las tengo que quemar. Me dice que nunca más vestiré ropa alguna… al menos de momento. Luego con una maquinilla de afeitar me deja la cabeza pelada, al cero, como una bola de billar. Después me pasa la maquinilla por todo el cuerpo para que no me quede un solo pelo. Al mediodía me sube Ashley al piso superior. Yo gateo al lado evitando que me pise la mano, pero estoy tan nervioso que me desconcentro un par de veces y el dolor cuando me pilla el dedo meñique bajo el tacón de su bota me obliga a resituarme mentalmente. Entramos en una habitación. Nunca he estado en el piso superior. Está claro que es donde están las estancias privadas de la señora y de su hija. Todo es muy lujoso, como el resto de la casa que ya conozco. Ashley me da una ligera patada con el costado de la bota y me pongo en posición: barbilla apoyada en el suelo, manos delante, culo en pompa. A la altura del suelo que es lo que alcanzo a ver diviso a un par de metros por delante unos pies calzados con sandalias rojas, de finas tirillas que se cruzan por delante de los dedos de uñas pintadas del mismo color intenso y brillante y una tira que sujeta las sandalias al tobillo. El ...
... tacón es de una pulgada, perfecto. Ambos pies están cruzados, uno apoyado plano en el suelo y el otro cruzado por detrás y apoyado por la punta. La oigo hablar con Ashley y por su voz deduzco que debe rondar los veinte años, quizás dieciocho o diecinueve. Su voz es cortante pero su timbre es agradable. Por delante de mis ojos veo pasar a Dirty. La esclava de la señorita se para delante de mí y me acaricia la cabeza. —¡Jajajajaja…! has visto qué lindo está tan pelón, mi señora? —Sí, quiero usar su cabeza de reposapiés… ¡Anabela…! Controla las eyaculaciones? —Sí mi señora. —Acércamelo, Dirty… y descálzame… quiero probar su cabezota… Dirty camina hasta mí. Sus pies descalzos se detienen junto a mis labios y su olor me llega diáfano. Me excito. Dirty tiene los pies bonitos a pesar de que no están cuidados. Tira de mi correa y me desplazo sin levantar la cabeza, con los codos y las rodillas. Luego Dirty descalza a la señorita de sus lindas sandalias y ésta me apoya los pies en mi calva cabeza. Me estremezco de placer al contacto de sus cálidas plantas. —Es muy justo. Necesitaré otro perro. ¡Ashley…! ¿tenemos algún otro disponible? —Sí mi señora… está clams. —No lo querrá mamá, verdad? – se interesa perla —No… que yo sepa, claro. Pero imagino que no. Ayer la oí hablar con una amiga y creo que quieren comprar un par más de esclavos. —Bien, pues rapa al cero a clams y súbemelo. Y átale las manos a la espalda… a los dos, a clams y a éste… – me señala. Media hora después clams adopta la ...