Nuestra amiga argentina invita a su casa a Pau
Fecha: 07/11/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: dantraloco, Fuente: CuentoRelatos
... ¡como queríamos! Y siempre había lugar.
Acá hay algo que les quiero aclarar, que creo que ya lo conté alguna vez, Pau se la juega muy de lesbiana, pero yo la hice coger con un par de chicos y vi como acababa como una Hija De Puta, pero ella dice que es mas lesbiana que otra cosa, por lo que tiene “todos los juguetitos” me entienden ¿no?
Los que les conté recién es porque después de hacer el 69 acabar como perra, paso un ratito, y me dice: “Caro hoy te voy a re coger” “¿eh?” Le digo yo: “si siempre cogimos”, y Pau me dice: “si, pero esto hace tiempo que ¡no lo hacemos!”
(Esto que les voy a contar con la única que lo hice es con Pau).
Saca de la cartera (que como les conté estaba segura que algo traía), y si, saca un cinturonga, pero no cualquiera era una pija de goma y ¡grande!, le digo: “guacha me matas con ¡eso!” y me dice: “Caro, te encanta la pija, bueno esto no es una pija de verdad, pero déjame, solo déjame, no te resistas y te va a gustar”.
Yo tengo el si fácil, más si es para coger, se lo pone, y me dice: “chúpala” y me pongo a chuparla, mientras ella se empieza a entretener con mi conchita, hasta que logra que ya todos mis jugos salieran y me ¡re calentaba!
Me dice que me ponga en cuatro, le hago caso, me sigue tocando bien la conchita, metiéndome los dedos, yo agarrándome de las sabanas, hasta que siento que me empieza a meter esa pija de goma en la concha, poco, me la pone poco, me la saca, me la empieza a poner de nuevo, hasta que me la pone ...
... toda, siii, toda entera, me dolió, mis gritos de: “ayyy, forrra, me dueleee”, al final se transformaron en gemidos ¡de placer!, me coge así ¡en cuatro! Me la pone, me bombea (parecía que me estaba cogiendo un chico) hasta que me hace acabar ¡de nuevo!
Yo, la verdad ya quería descansar un rato, pero la guacha me dice: “esto te va a gustar”, se moja sus dedos con todos mis jugos y me los empieza a meter en la cola, un dedo, despacio, hasta que me lo mete bien entero, bien hasta el fondo, y después me mete otro, despacio, hasta que tenia los dedos bombeándome el culo y yo como siempre ya transpirando y ¡gimiendo!, gozando (no se bien cómo explicar lo que le expresaba, digo la calentura que me estaba agarrando).
Hasta que saca los dedos y siento que me empieza a meter esa enorme pija de goma: “nooo”. Le digo: “nooo, puta me matas”, pero mi voz, que ya casi no podía hablar en el fondo decía que ¡sí!
Me agarra de la cintura, ye me la empieza a poner, me dolía, sentía literalmente “que me estaban rompiendo el culo”, y era así, pero después eso se fue convirtiendo en placer (me gusta que me hagan la cola). Obvio que no me la puso entera porque no aguante, pero la guacha sabe cómo hacerlo y bien, me bombeaba hasta el punto en el que se daba cuenta que me dolía, hasta que me hizo acabar ¡de nuevo!
Ya ni se cuantas veces me había hecho ¡acabar!
Nos quedamos otra vez un largo rato en la cama abrazadas (no lo voy a volver a contar porque fue lo mismo que antes, acariciándonos, ...