HORMIGONANDO 3 - Relatos Eróticos

HORMIGONANDO 3

... vos hacés es rico! – Amalia estaba encantada.
Y así fue como Amalia y yo terminamos la cena con hermosos orgasmos. Dalia y Claudia se ocuparon de chupar fluidos y semen, y limpiar concha a la abuela y mi pija.
Fuimos a ver un poco de tv. Nos sentamos en la sala. Yo, entre Dalia y Amalia. Claudia sobre mi regazo. No se la enterré. Solamente puse la pija entre sus glúteos. ¡Un documental sobre un terremoto! Eso es lo que había en pantalla. 
Para no angustiarnos nos dedicamos a lamidas, chupadas y mamadas varias…
Dormí junto a Dalia, dado que fue la menos atendida en las últimas horas. Un par de polvos antes de dormirnos, uno cuando nos despertamos y otro luego de que Claudia fue a la escuela. 
La nena ya me lo había dicho. Quería ir a la obra con la abuela, para que ella la conociera… Es puro grupo. Lo que ella quiere es demostrale a la abuela las cosas que puede hacer conmigo. Esto sucede el día que Romualdo, un próspero chacarero, había organizado un asado para los amigos…, para festejar vaya a saber qué.
Romualdo viene a buscar a Dalia para que ayude a Virginia, una amiga que tiene en casa, a preparar la comida para el mediodía. En realidad la había venido a buscar para cogerla, junto con Virginia, su amante de paso, según dicen, todo esto chimentos de Amalia. Luego de que Claudia fue a la escuela, Dalia y yo nos mandamos un buen polvo, como para empezar el día. Además ella sabía que iba a venir Romualdo, y como no sabía que oportunidades habría durante el resto del ...

... día, lo mejor era coger temprano, por las dudas.
Cuando la nena regresó de la escuela, fuimos hacia la obra. Luego iremos al asado de Romualdo. Íbamos, entonces, hacia la obra, a eso de las 12 y media, pero era un mero pretexto de Claudia. Ya lo sabía. No habíamos andado más de cinco minutos hacia la obra. La nena, que venía sentada a mi lado, junto a la abuelita, en las butacas delanteras, habla,  cariñosa, mientras me acaricia el muslo…
-Dani…, ¿me dejás que te la chupe un poquito? – ¡Me lo imaginaba! Yo le conté lo que hacía con Jazmín cuando salía con auto o camioneta. Ella quiere mostrarle a la abuela de lo que es capás.
-Si mi amor, vos sabés que mi pija está siempre a tu disposición. - La abuelita nos mira y sonríe. ¿Supone que luego será su oportunidad? 
Me baja la cremallera y la saca. Se inclinó sobre mi falda y se la metió en la boca, besando y lamiendo. La nena es genial. Desde chiquita la mamá le había enseñado a mamar. A cada cliente le cobra un sobreprecio por la mamada de la nena. Me da un placer absoluto. Miro de reojo a la abuelita. Se pasaba la lengua por los labios. Sin duda lo estaba deseando. Ella me sonríe.
-¿Estás muy mojada? – Preparando el ambiente.
-¡Una barbaridad! Claudia la chupa muy bien, ¿verdad?
-Sin la menor duda. Algo me contó Dalia de su preparación.
-Desde chiquita se fue preparando. – Amalia acepta el comentario.
-Claudia…, ¿por qué no le decís a la abuelita lo que hacemos en el asiento de atrás? 
-¡Jajaja! Si…, abuelita…, Dani me ...