1. LA VIRGINAL HISTORIA DE VIRGINIA


    Fecha: 27/09/2023, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... cachucha se mojó con tu juguito, porque estabas contenta… por algo… lindo, de chicas y chicos… ¿Estuviste mirando alguna revista?» «No, no. Yo…, bueno, me da vergüenza…» «¿Qué pasó?» «Es… que…, estuve espiando a mamá y papá…, y… ellos estaban en la cama…, desnudos…, y mamá estaba… así…, bueno…, de rodillas, con la cola parada…, y papá le había metido el pistolón… Y mamá le decía que estaba rico…, que lo hiciera más fuerte, y que no se lo sacara, y ambos se reían…, eso, bueno…, me gustó ver cómo se divertían. Yo no sé porque, pero me mojé, me pareció que era pis. Me toqué allí, abajo. Y me gustó tocarme. Y me metí un dedito…, y me gustó. Y bueno. Me da vergüenza decirle. Pero tenía ganas de que mi papá me haga lo mismo.» «¿Tu papá?» «Si, si, pero sé que eso no se hace, no le voy a decir nada. Se va a enojar si le digo algo.» 
    “Don Romualdo me dijo que ahora no paraba porque no quería que yo llegara tarde, y me pasó un pañuelo para que me secara, y luego, cuando saliera de la escuela, el vendría a buscarme. Yo le dije que sería muy lindo. Cuando salí de la escuela, la camioneta de Don  Romualdo estaba esperando. Siempre venía mi papá, pero como sabían que Romualdo era el dueño de la chacra y la había traído varias veces, no llamó la atención a nadie. De la escuela, me refiero…” 
    “Don Romualdo me dijo que íbamos a pasear y que le dijera a papá y a mamá que habíamos tenido que hacer unos mandados. Y fuimos a la Blanqueada. Yo no sabía que era y para qué. Paramos entre los ...
    ... árboles. En el viaje, Don Romualdo me estuvo acariciando las piernas y la cachucha. A mí me gustaban mucho sus caricias. ¡Me hacía mojar! ¡Y a él le gustaba que me mojara! Me decía que tenía un juguito muy rico y se chupaba los dedos que me metía. Cuando paramos, Don Romualdo me levantó de la butaca y me sentó sobre el volante. Me levantó la pollerita, me sacó la bombacha y metió la cabeza entre mis piernas, chupándome toda la cachucha, llena de besos y lamidas. Yo temblaba toda, tenía cosquillas y me hice pis. Don Romualdo me dijo que no me haga problema, que haga todo el pis que quiera, que él lo tomaba todo. ¡Me gustó muchísimo! Me levantó más, me dio vuelta y me besó y chupó la colita. Volví a hacerme pis y Don Romualdo volvió a chupame. ¡Todo fue riquísimo!”
    “Luego me limpió y secó, y me dijo que me pusiera la bombachita. Después se sentó en mi butaca, la del acompañante, donde yo estaba sentada. Me hizo parar y se abrió la bragueta. Sacó el pistolón, que era tremendo, más grande que el de mi papá, y me pidió que le diera besos. Yo estaba parada, entre la butaca y los aparatos de la camioneta, donde está la guantera, que le dicen. Hice lo que me dijo, y me gustó mucho. Don Romualdo tenía un pistolón muy rico, todo mojado, suave y tibio. Entonces Don Romualdo me pidió que abriera bien la boca y metió la cabeza del pistolón, lo que le había besado, nada más, porque más no entraba. Me pidió que lo acariciara con mis manos. Me hizo agarrarle el pistolón con las dos manos y que ...
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