LA VIRGINAL HISTORIA DE VIRGINIA 2 - Relatos Eróticos

LA VIRGINAL HISTORIA DE VIRGINIA 2

... hablando de dinero. Yo le pagaré lo que usted quiera…, pero… le puedo dar mucho más, cosas lindas…, como las que enseñó a Claudia y Tina…, las cosas lindas que usted les enseñó…, yo quiero que me lo enseñe a mí…, a mí también… ¿Entiende ingeniero?
-Mire señora… ¿cómo se llama? 
-Lorena…
-Mire…, estimada Lorena. Usted es muy linda…, y muy deseable… - Ya había entendido lo que me ofrecía para enseñar a su hija… ¡Jamás rechazaré una mujer! ¡Una mujer despechada es el peor enemigo del mundo! – Le diré… que en verdad me gustaría mucho, muchísimo, hacer con usted lo que hacía… y hago, con Claudia y Tina…, pero… ¿sabe? Tengo que descansar… algo… los fines de semana…, en realidad…, tres cuarto de fin de semana, pues el sábado a la mañana, trabajo…
-Lo que usted quiera ingeniero, cuando quiera. Mi nena no le dará trabajo. Es muy dispuesta y obediente…, y aprenderá rápido lo que le enseñe… Verá que sí. ¡Por favor! ¡Por favor ingeniero! En tres o cuatro semanas… mi nena aprovechará todo lo que le enseñe…
La mujer se movía y meneaba. ¡Quiere que la coja para que enseñe a su hija! ¡Está loca! Me vino a la memoria Claudia y su mamá. Dalia inventó lo de la obra para coger…, y ahora ésta quiere coger con el pretexto de que enseñe a su hija. ¿Qué pasa? ¿Es una joda o me quieren cagar? 
-No señora… mire… Yo…
-¿No le gusto?
-No, no es eso. Usted es muy linda, sin duda. ¡Está buenísima! ¡Sin duda! ¡Tiene todo lo lindo, muy lindo!¡Lo haría con mucho placer! Pero ahora debo descansar un ...

... par de semanas… por recomendación del médico… - Algo tenía que inventar. – Tengo que estar un par de semanas sin sexo. ¿Sabe lo que le pasó al marido de Etelvina?
-Si, lo sé, tiene razón… ¿y cuándo puede ser?
-Yo le digo. Le prometo que no me olvidaré. Pero no quiero ningún chantaje ni soborno, por más linda que sea usted.
-En dos o tres semanas, nada más…, puede ser… ¡me gustaría mucho!
-A mí también Lorena. ¡Pero son mis días de descanso!
-Pero…, me han dicho… ¡Qué bueno! No quiero molestarlo. Usted se toma los días que quiera… Cuando no tenga ganas no le da clase…
-Bueno, puedo hacerlo, tengo derecho…
-Por eso ingeniero. Pierda dos o tres semanas, y yo se lo compenso ¡le va a gustar mucho! Así mi nena aprende. ¡Por favor! ¡Por favor! No quiero hacerle daño a usted, ingeniero. Sólo quiero que mi nena ande bien en la escuela. ¡Por favor! ¡Se lo ruego! 
-¡Ufff! Traiga a su hija el sábado a las 5 de la tarde. 
-Como usted diga. ¡Muchísimas gracias, ingeniero! ¡Le juro que la va a pasar muy bien! Conmigo, digo…
El sábado a las cinco estuvo con su hija, una nena muy rica. 
-¡Hola señora! ¿Cuántos años tiene su hija?
-15 años, ingeniero.
La hija está muy buena. Lo pensé pero no lo dije. De cualquier manera me parece que la madre se va a quedar.
Empecé con las lecciones en la habitación que uso de trabajo. La mamá sentada en el sillón de la sala, viendo tv. La nena y yo alrededor de la mesita, tan pequeña, era sólo para mí, que permanentemente tocaba las piernas de la ...