LAS NENAS MIMOSAS 2 - Relatos Eróticos

LAS NENAS MIMOSAS 2

... y tranquilos.
-Y… sí. Mientras están cogiendo te dicen… “¡movete puta! ¡saltá conchuda! ¡abrite el culazo!” ¡Esas cosas!
	Ahora ambas me masajeaban la pija…, un poquito cada una… De vez en cuando se agachaban para besarla o lamerla.
-¡Eso no tiene nada de malo! – Se lo dije.
-¿Te parece bien? – Ahora fue Sole la que se enojó.
-Miren… ¿Les gusta el sexo, no? ¿Les gusta coger?
-¡Si, por supuesto! ¡A todas las mujeres de acá les gusta! Bahhh…, yo creo que a todas las mujeres del mundo…
-¿Y entonces? ¿Con quién les gusta coger? ¿Con cualquiera?
-¡No! ¡Solamente con quién nos gusta…, como vos!
-Entonces está bien, son putas…
-¿Eso te parece a vos? – Sofía frunció el seño.
-Claro…, putas, no prostitutas… Prostitutas son las que cogen con quien les paga. ¡No es lo mismo! A mí tambien me gusta coger. Con este tema de los géneros, tan de moda, si ustedes son “putas”, yo soy “puto”, pues tambien me gusta coger…
-¡¿Cogés con hombres?! – Prácticamente ambas se extrañaron.
-No, no. Hay un muy mal uso del lenguaje. Los que cogen con el mismo sexo no son putos, son homosexuales o gays…, y las mujeres lesbianas. ¡Y hay muchos bisexuales, de uno u otro sexo! Cuando era adolescente, fui bastante bisexual, aunque activo. Me cogí a algunos amigos y compañeros que querín probar…, y a varios les gustó! ¡Al final de cuentas, un culo es un culo! ¿Entienden?
	Me miraban como si fuera de otro planeta. No sé si estaban asoradas o asombradas…
-Es… raro… Bueno, si vos lo decís… - Sole ...

... estaba tiernísima. Me acaricia y me besa. – Entonces no me molesto más… ¡Jajaja! ¡Voy a coger complacida! ¡Por más que me digan “puta”!
-¡Jajaja! ¡Yo también! – Las chicas estaban nuevamente contentas. 
-Además…, la verdad… ¡tienen unas conchas y unos culos de maravilla! ¡Cómo para no decirles “conchudas” y no llamar a esos culos “culazos”! ¡Jajaja! – Ahora el relajado era yo. Había tenido miedo de que se enfriaran. - ¿Y no les dicen “dame esas tetazas para una cubana”? 
-¡Jajaja! ¡Siiii…, lo dicen! ¡Sos la maravilla total! – Y se me largaron encima con besos, caricias y mamadas. 

-Bueno chicas, vamos a la cama… ¡Quiero cogerlas, cómo un buen “puto”! ¡Jajaja! - Nos levantamos y las tomé por el culo a ambas, un cachete en cada mano. Nos dirigimos al dormitorio.
	Me acosté a través, con los pies sobre el piso. La pija bien al palo y las nenas mamando alternativamente. Me puse un par de almohadas bajo la cabeza para verlas. Compartían la pija y se besaban entre ellas, intercambiando jugos y sabor. Yo estaba en la gloria, sintiendo sus labios y lengüitas en glande, tronco y huevos. Así como diez minutos, hasta que senti la probable venida de la eyaculación.
-¡Paren chicas! ¡Ahora es la mía!
-¡Jajaja! ¡Era hora! Pensábamos que no la meterías nunca! – Sofía pegó el grito.
 
	Me acosté sobre mi cadera izquierda.
-Vení Tesoro. Hagamos una cucharita. – Tomé a Sole de la mano y la coloqué de espaldas frente a mí. A Sofía le guiñé el ojo. Ella sabía que siempre tenía su turno. ...