1. ME SIGUEN COMPLACIENDO


    Fecha: 07/02/2024, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... Dani…, fui grosera… ¿Y yo no puedo ser como ella? ¿No hacemos todo lo lindo?
    -¡Mamita! ¡Sos 35 años más joven qué yo! A ella solamente le llevaba cuatro años…
    -Si…, pero puedo hacer todo lo que vos quieras.
    -No, mi amor. Dentro de pocos años yo seré un viejo total, y vos estarás en la flor de la vida, con toda la belleza y el deseo del mundo, sin igual. No habrá concha o culo tan hermosos como lo tuyo. No voy a poder complacerte de ninguna manera.
    -¡Pero yo te quiero mucho!
     
    Seguimos chupando chocolate, concha y pija mientras hablamos. 
    -Decime… ¿con tu esposa tenías tantas mujeres como ahora?
    -No, para nada. Yo era bastante fiel, si la fidelidad significa algo. Nunca la deje de amar, ni siquiera cuando estaba entre las piernas de otra. No había ninguna duda sobre eso, ni siquiera cuando cogía con su madre…
    -¡Ah! ¡También cogiste a tu suegra! ¡Jajaja! – A Soledad le divertía mi pasado. - ¿Y ella hacía lo mismo?
    -No lo sé. Supongo que sí. Nunca anduve tras ella. Creo que te lo dije, no soy celoso, nunca lo fui. El placer sexual no tiene nada que ver con el amor. Quién ama, quiere coger, sin duda, pero no quiere decir que la inversa sea igual.
    -¿Vos me querés, aunque sea un poquito?
    -Te quiero con toda mi alma, por eso quiero que seas totalmente libre. No quiero que te enganchés para nada. Quiero que lo hagás conmigo por puro placer, y si gozás con otro, también lo tenés que disfrutar. Sin duda, sin preocuparte por otra cosa.
    -Si papito, pero desde que te ...
    ... conozco, bueee…, desde la primera vez que me cogiste en la oficina…, no puedo gozar de igual manera a como lo hago con vos… - Sole es tan dulce y tierna…, y hace todo tan bien…, que me cuesta permanecer neutral. - ¿Con tu esposa no hiciste…, algún intercambio, algún jueguito que le gustara a ambos?
    -Si, sí. Con una ex alumna de ella… 
    Me lo dijo en algún momento, qué a esa chica, 17 o 18 años, yo le gustaba. ¡Yo tenía 26 años! No se lo dijo directamente, pero se lo dio a entender. Era una chica macanuda, buenísima, muy buena alumna, muy linda. Bueee…, un día me preguntó si me molestaría que la traiga a trabajar a casa. Era de familia muy humilde, y le vendría bien ganarse unos pesos. Le dije que si, que viniera cuando quiera. Entonces arregló para que estuviera tres días por semana como empleada doméstica, y hacía todo el trabajo muy bien. Nunca la casa estuvo tan impecable. Yo casi no la veía, pues normalmente me iba a trabajar más temprano. Luego de tres o cuatro semanas, mi esposa me preguntó si me gustaría hacer un trío con ella. ¡Imagínate, casi me caigo de culo! Le dije la verdad. Qué si ella quería – o sea mi esposa -, me gustaría, claro, siempre que la chica estuviera de acuerdo. Me dijo que le iba a preguntar…, bueno…, más o menos le haría entender que a mí me gustaría y que ella estaba de acuerdo, porque sabía que la nena era muy buena… ¡y tenía ganas! ¡La había visto oliendo y chupando un calzoncillo mío! Esto no se lo dijo…, me lo dijo a mí.
    Y así quedamos. Arreglamos ...
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