Campamento - Parte 5
Fecha: 19/11/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: johna.2012, Fuente: CuentoRelatos
... pese a mis esfuerzos por no ser visto, mi madre me descubrió.
―¿Recién llegas? ―preguntó sorprendida, mirando su reloj.
―Lo siento, se me pasó la hora.
Los ojos de mi madre reflejaban todo tipo de sentimientos, menos cólera.
―¿Está todo bien? ―pregunté preocupado al ver que no me reclamaba como siempre.
―Sí, hijo ―contestó pero era obvio que algo le sucedía―. Ve a dormir que mañana debes ir al colegio.
Sin querer discutir o hacerla sentir peor, me dirigí hacia mi habitación y me tiré sobre mi cama, abrumado por todas las cosas que me habían pasado ese día.
Entonces mi celular sonó.
< ¿Todo bien por tu casa? >, preguntó Raúl, provocándome una involuntaria sonrisa.
< Sí, gracias por traerme >, contesté seguido de un emoticón de carita feliz.
< Cuando quieras, peque >, respondió < Ahora ve a dormir, mañana será otro día>
< Gracias por todo >, le escribí < Hablamos mañana, buenas noches >
< Buenas noches, Adrián >
Con una sonrisa en los labios me fui a dar un baño y luego a la cama. Aquel había sido un día muy largo y a pesar de que había dormido bien en brazos de Raúl aquella tarde, aun así me sentía muy cansado.
―¡Adrián! ―llamó Jordán a penas me vio entrar al salón de clases.
―Hola Jordán ―contesté desganado, aterrado por la idea de tener a Cristian cerca todo el día, en el mismo salón de clases. Si hubiera sido por mí no hubiera regresado a aquel colegio, pero no quería darle el gusto de verme huir de él, quería demostrarle que ...
... podía superarlo fácilmente.
―¿Qué pasó contigo ayer? ¡Te desapareciste! Tuve que inventarle una excusa al profesor para que no mandara a llamar a tu mamá… Si alguien pregunta, tu tía abuela falleció ayer y te vinieron a llevar.
―Gracias ―atiné a contestar, con la vista fija en la puerta del salón, atento para ver en qué momento entraba Cristian.
―¿Qué sucede contigo? ¿Por qué no me cuentas? ¿Ya no me tienes confianza?
Después de un largo rato de insistir, por fin me animé y le conté todo lo que había sucedido con Cristian, obviando lo que había sucedido después.
―Ese maldito ―exclamó Jordán en voz alta, molesto―. No puedo creer que te haya dicho eso… Sigue siendo el mismo insensible hijo de puta de siempre.
―Sí, bueno… sólo espero no encontrarme con él hoy.
―Pues ya se le hizo bastante tarde. No lo he visto y él siempre es el primero en llegar.
―Mejor si no viene ―dije molesto, sin saber exactamente como sentirme.
Entonces Pablo entró al salón y me alzó la mano, llamándome.
―Allí te habla la gorda de tu amiga ―susurró Jordán agriamente.
―En lugar de tenerse cólera, deberían intentar llevarse bien, somos del mismo equipo.
―No… a mí no me agradan las pasivas de closet que actúan como heteros pero se derriten cuando tienen un pene adentro.
―Tu también te derrites cuando tienes un pene dentro.
―Sí, pero no ando detrás de las chicas para aparentar ser macho.
Con una sonrisa en los labios por el comentario de Jordán, fui hasta donde se ...