Reemplazando a mi padre
Fecha: 08/12/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: Djavan, Fuente: CuentoRelatos
... dijo que me fuera con cuidado, para que no fuéramos a chocar. También se criticó que ella no hubiese nunca aprendido a manejar.
A la lejanía pude ver el letrero de un Motel, que había visto en otros viajes que había realizado con mi padre. Me detuve a un costado y bajé a orinar. Al subir ella me preguntó cómo estaba y le dije que la verdad estaba muerto de sueño. Ella me sugirió que durmiera un poco y que luego continuáramos. Le dije que me parecía lo mejor y lo más prudente, pero que buscaría un lugar no tan cerca de la carretera u poco más allá. Cuando pasamos por el Motel, sin pensarlo dos veces, me metí. Ella solo me miraba, sin decir nada.
Le dije que quedarse a dormir al lado de la carretera, podría ser muy peligroso, porque nos podían a asaltar, y que no me importaba pagar algo de más, contar de no correr riesgos. Ella me encontró la razón y entramos a la primera cabaña que estaba disponible. Apenas entramos sonó el citófono de la habitación. Me preguntaron si me quedaría por cuatro horas o por toda la noche. En esos momentos mi madre recorría la habitación y verla dentro de ese ajustado vestido, admirando su figura, su redondo y hermoso culo, su hermoso pelo opté por lo segundo. La joven me preguntó si deseaba algo para beber y ordene dos tragos. Mi madre me miró con una cara extrañada, pero cuando le corté, le expliqué que venían dentro del valor de la habitación así que no había porque desaprovecharlos.
Me recosté en la cama y nuevamente le dije lo bien ...
... que se veía. Le dije que se probara los otros vestidos, ahora más en confianza para ver cómo se veía. Ella me dijo que no, pero yo ya había salido a la camioneta a buscar las bolsas.
Saqué todos los vestidos. Ella me dijo que le daba un poco de vergüenza, ya que las paredes del baño, eran de vidrio, y aunque no se veía a través de ellos, claramente se vislumbraba la silueta. Yo le dije que no fuera tonta, que éramos familia y que no había de que avergonzarse. No muy convencida entro al baño y comenzó a desnudarse.
La visión a través de los cristales termino por completar mi excitación. Perfectamente podía ver cada uno de sus movimientos. Primero se desabrocho el vestido por la parte de atrás y este cayó por su propio peso al suelo. Ya me imaginaba como se vería mi madre solo en ropa interior. Luego se colocó el vestido y arreglándose un poco el pelo, volvió a salir a la habitación.
Se veía espectacular, y se lo hice saber. Ella ya un poco menos tímida conmigo, me dijo que ya se sentía más cómoda con esa ropa. Le hice ponerse uno de los vestidos que había elegido yo. Era mucho más corto que ese, entro nuevamente al baño y se cambió. Me dijo que con ese no se atrevía a salir, ya que le quedaba demasiado chico. Le dije que saliera para darle mi opinión.
La verdad ese vestido dejó lejos a todos los otros. Era de color rosado, de una tela muy delgada y aparentemente era una talla menos que la de mi madre. Mucho más corto que los otros, dejaba al descubierto sus hermosas ...