Todo por culpa de una borrachera - Relatos Eróticos

Todo por culpa de una borrachera

... que fue mi esposa quien lo hizo, dio por sentado que estaba disponible. ¡Tremenda idiotes la mía!
Elena permaneció así varios minutos, mirando al techo con los ojos muy abiertos y yo la miraba fingiendo estar dormido. Miguel trató de abrazarla y ella lo rechazó diciendo --"voy a apagar la luz ". Sucede que la claridad que llegaba es porque había regresado la energía eléctrica y habíamos dejado encendida la luz de la sala. También había cesado la lluvia, pero aún era de madrugada.
Veo salir a Elena de la cama completamente desnuda y regresa enseguida con un rollo de papel higiénico y le dice a Miguel -- "Ten para que te seques". Se vuelve a ir, escucho a lo lejos que le baja al baño y después de apagar la luz regresa a tientas porque todo quedó a oscuras.
Al poco rato escucho la respiración de ambos durmiendo, pero yo solo dormiré, ya no me pude dormir tratando de pensar y comprender lo sucedido, pues aún no se aclaraba mi mente. Pero, ¡Por increíble que parezca, no sentía celos! Eso es lo que me sorprendió. 
Pasaron tal vez unas dos horas y comenzó a entrar claridad por la ventana, señal de que estaba amaneciendo. Yo me sentía adormilado pero los efectos de la cruda eran ya muy fuertes, pero trataba de controlarme fingiendo estar dormido esperando ver la reacción de Miguel y Elena quienes aún seguían dormidos, al menos eso pensé.
Ya con la claridad del amanecer, con los ojos entreabiertos veo a Miguel abrazar a Elena y ponerse cariñoso. Elena corresponde varios minutos ...

... a las caricias pero de pronto reacciona al reconocerlo y le dice bajito-- "¡Ya estaré quieto, Alberto puede despertar!" "Lo hacemos rapidito" --le dice Miguel, y comienzan de nuevo.
Ahora ya en mis cinco sentidos pude ver a mi esposa entregándose a mi amigo también ella muy consciente de lo que hacía.
Terminan, se secan usando el rollo de papel y Elena dice-- "Voy al baño". Sale de la cama totalmente desnuda como estaba, pero al salir prácticamente me descobijo y ya no pude fingir que estaba dormido. Hacia bastante frío.
Fingí despertar y fingí sorpresa al mirar a Miguel ahí-- "¿Que haces tu aquí?" --le dije, y el contesta -- "pues aquí, invadiendo tu cama". Tuve que fingir indiferencia y decirle que no me acordaba ese había quedado con nosotros. Le pregunto -- "¿Dónde está Elena?" "Fue al baño" --me dice el, evidentemente nervioso. Escucho a Elena bajarle al baño y regresa enseguida. Yo creí que aprovecharía para ponerse la bata o alguna ropa, pero no. Regresa desnuda tal como se fue y ahora con toda la claridad de la mañana. ¿Como fingir que no supe lo que pasó? Tuve que tragarme mi vergüenza.
Llega Elena y se mete en medio de los dos, venía completa helada y dice -- "¡Calientenme que tengo frío!"
Se acurruca entre los dos y permanecimos en silencio un buen rato. Ambos dándole calor a Elena, hasta que ella le dice a Miguel -- "¡Ya estate quieto travieso, no tienes llenadera!" Ambos rien pero yo seguí serio y Miguel me dice-- "¿Estás molesto?" "¡Claro que no!" Contesté ...