Relatos eróticos esposos cómplices cap 140 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 140

Hola amigos me llamo Roly, tengo 40 años, soy contador independiente, blanco, pelo y ojos negros, 1.80 de altura, de verga generosa ( 18 x 4 ) y calentón en la cama.

Casado con Ana más 20 años, blanca, 1.50 altura ojos claros, cabello castaño y de bonito cuerpo, pero más fría qué el hielo.

Tenemos una hija de 18 años, blanca, 1.55 de altura, ojos pardos, pelo castaño, de bonito cuerpo, igual qué él de su madre, mal carácter y temperamento frío.

Nos casamos muy enamorados y ella me ayudaba en mi trabajo y también se encargaba de la casa y de nuestra hija.

Conforme pasaban los años se agudizaban nuestros problemas, por qué yo quería seguir cachandola todos los días y a ella le aburría.

Hubo temporadas qué mis cosas las hacía en la calle, aunque a ella no le impottaba, viniendo tranquilo a casa y seguír sin problema.

Pero siempre quiero estar con ella, por qué ahora cacha rico, después de haber sufrido meses para qué aguante mi verga, pero en las pocas veces que lo hacemos, le hago de todo y ella colabora.

En éstos dos últimos años, los polvos se fueron espaciando más en el tiempo, teniendo serios problemas hasta de separación, por qué con mi plata, se pasaba muchas horas en el casino junto a su hija. Ante mi desconfianza la mandé espiar y según el informe me quedé tranquilo. 

Por lo expuesto no me quería separar y le daba el dinero qué me pedía, por qué se lo cobraba bien, cuándo tenía la oportunidad de cacharla.

A veces no salía a divertirme ...

... por qué me dejaban sin dinero y arrecho cómo me dejaban, les echaba ojo a las dos, qué estaban cómo para una noche loca, teníendo qué hacerme una paja.

A mi señora yá no le decía nada por odvias razones,  y sólo esperaba qué mi hija terminara de estudiar y cumpliera sus 18 años.

Soporté rompiéndome los lomos para ganar un dinero, qué servía para que estén ausentes de la casa, dándo gusto a su vil vicio.

Hasta qué llegó el momento en qué cumplió los 18 años. Reunidos en casa comimos una torta los 3 y 5 familiares y el dinero de la reunión, que siempre solemos hacer y a mi me agrada, me lo pidió para divertirse en su vicio.

A los 2 días y como siempre entró a mi oficina mi mujer, saliendo con el dinero para su vicio. Seguido entró mi hija sonriendo.

Hija : Papi, me das mi propina por favor.

Yo : Hija, cuántos años tienes ?

Hija : 18 papá, por qué ?

Yo : Hijita, yá tienes edad para trabajar. Así qué hazlo y ayuda a la casa y el resto te lo diviertes.

Hija ;  Qué ? Eres un desgraciado. Pero para tus putas si tienes dinero. 

Yo : Es qué ellas me hacen pasar un buen momento.

Hija : Qué tratas de decirme, qué si yo te hago pasar un buen momento, sí me darías dinero.

Me quedé helado, qué pasó para que me diga éso. O yo metí la pata o ella entendió mal, por qué yo nunca quise decir éso.

Ahora qué respondo ? Pensé 

Yo : Así es, en el mundo de los responsables mayores así funciona.

Hija : Razón tenía mi madre, eres un hombre verga loca sin ...