¿HAY MUCHAS COMPLACIENTES?
Fecha: 25/03/2025,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... piense que me interesa o importa menos que Sofía. Traté de complacerla en todo…, hasta lo hice tan pausado…, que logré tener los huevos nuevamente llenos…, pero sí…, tendré que reiterar la visita mañana…, para poder gozar de las alumnas; habían pasado más de un par de horas; se acabó el tiempo.
La hora final llegó más rápido de lo que pensábamos
-No dejés de venir mañana. – Lucía me lo recordaba, como si hiciera falta. - Serán todas para vos.
-¿No tenés más ganas? – Pensé que Lucía se alejaba.
-Si, tengo, pero lo haremos alguna noche en tu cama, o en la de Sofi, es más cómodo. Yo la iré a “visitar”.
Al día siguiente volví a la escuela. Las dos estaban en las aulas. Me llamaron.
-Chicos, les presento al ingeniero Dani, que va a hacer unos trabajos en la fábrica de aceite para que pueda volver a operar, y generar más trabajo en el pueblo. – Sofía tenía toda la intensión de hacerme quedar muy bien. - Él lo hace con toda la voluntad, para que los papás de ustedes puedan volver a tener un buen trabajo…, así que pórtense bien, que el ingeniero se va a acordar de ustedes siempre. Él les dará una charla sobre el trabajo en la fábrica para que ustedes se lo digan a sus padres, y que muy pronto volverán a trabajar allí.
-Ahora los chicos pasen a la otra aula y las chicas vengan acá. – Lucía daba las instrucciones.
Así fue, les di una charla “técnica” a los chicos y otra “social” a las chicas. A los chicos le dije lo interesante que ofrecía el trabajo en la fábrica para ellos ...
... y los padres, y a las chicas lo mismo, pero con el acento en los “buenos maridos” que podrían “conseguir” con los que trabajaran allí, si ellas eran “complacientes y cariñosas”.
Cuando preguntaron que era “eso”, las maestras, tal lo acordado, les explicaron: “ser cariñosas, amables con los varones, y darles los gustos para que se sientan bien y con ganas de trabajar. Eso hace que siempre las atiendan bien y le den todos los gustos…”. Siempre estaba presente el doble sentido en las palabras y la “manera” de cada una de ellas, junto a las pícaras sonrisas de maestras y alumnas… ¡Todas sabían a qué se referían! Tal como venía la mano, en ese pueblo no había otra “inquietud” que coger toda vez que fuera posible.
Yo no tenía otra intención que caerles bien y simpático a las chicas. Junto a las maestras, quería enseñarles lo “mejor que la pudieran pasar”. Con toda esta sanata, ya tenía identificada a cuatro o cinco hembritas muy predispuestas y complacientes. ¡No necesitaba más!
Se lo dije a las docentes.
-Chicas…, hay cuatro o cinco alumnas que me parecen muy bien predispuestas. – No conocía las costumbres del pueblo para convencerlas para ir a la cama. - ¿Qué hacemos?
-No hay problema. Invitá a la que te gusta, a “conocer algo muy interesante…, que luego transmitirás a todas”. – Lucía sabía a quién se dirigía y cómo hacerlo. - La que elijas, sea la que sea, no te va a decir que no… Todas saben de qué se trata y seguramente quieren “participar”. Es lo que pasa cada vez que ...