NUEVE AGUJEROS PARA UN PERCUTOR - Relatos Eróticos

NUEVE AGUJEROS PARA UN PERCUTOR

¡Estaba tan caliente! Valeria me llevaba al paraíso. ¡Tan pequeña y tan voluptuosa! 
-¡Ay diosito! ¡Me hago! ¡No aguanto más! ¡Metela! ¡Más fuerte! ¡Si! ¡Si! ¡Así! ¡Papitoooo!
	Se derramó como si fuera la última vez. Sus fluidos, encharcados con meos, chorreaban por sus muslos y por los míos. ¡La cama estaba inundada! Luego tendría que explicarle a Paula. Decidí continuar hasta llegar a mi propia eyaculación. Desde estar completamente dentro de su interior, comencé a sacarla y meterla lentamente, sintiendo el roce de su recto en el tronco, hasta llegar a las tripas, algo de un placer infinito. Valeria suspiraba y gemía suavemente. 
	Yo le sostenía en alto la pierna, para que no tuviera que hacer esfuerzo y pudiera relajarse plenamente. El suave bombeo dentro de su culo se había convertido en el viaje al paraíso, no solamente para mí.
-¡Ay papito! ¡Qué rico es hacerlo con vos! ¡Me llevás al séptimo cielo! - ¡Jajaja! Reía en silencio… ¡nunca supe lo que era el séptimo cielo! ¡Ni idea tenía de donde la nena había sacado esas palabras!
-¿Lo hiciste con muchos?
-¡Noooo! ¡No! ¿Por qué preguntás?
-Como decís… “qué rico es hacerlo con vos…”, es como si pudieras comparar con muchos otros…
-¡No, no, papito! ¡Perdoná! ¡Soy una estúpida! ¡Son palabras que le escucho a mamita cuando está cogiendo con otros que no son mi papá! ¡Dice esas cosas!
-¡Jajaja! ¡Es muy divertida tu mamá!
-¡Jaja! ¡Si, papito! ¡Creo que le gusta mucho! ¡Creo que tendrías que ir con ella! Te va a gustar ...

... mucho…, y a mami también…
-Y… ¿eso cuándo podría ser?
-Y…, cuando acabemos nosotros…
-Prefiero en otro momento…, para…, bueeee…, tenga más… preparados los testículos… ¿entendés?
-¡Jajaja! ¡Si, claro! ¡Cuando tengas los huevos llenos de leche!
-¿Cómo aprendiste eso?
-En la escuela. La seño Sofía nos explica todo, muy bien, lo del sexo, como se hace, como se protege, como se goza…, bueeee… todo… ¡Sabe mucho!
-¡Sin duda! ¡Sofía es una experta!
-Ella vive en donde estás vos… ¿ya te la cogiste?
-En lo mejor de los mundos…
-Seguro que… - Valeria se detuvo de pronto. - ¡Pero claro! Fue en la sala de las maestras… ¡Jajaja! ¡Escuchamos todo! Como cogían Sofi, Luci… y vos… ¡Jajaja! ¡Escuchamos que te pedían que le hagás el culito!
-¡Jajaja! ¿Y qué decían ustedes?
-¡Jajaja! Los chicos se querían coger a las seños…, y las chicas… queríamos coger con vos… 
-Bueno… ¡te diste el gusto! - ¡Le di un empellón y la ensarté hasta el fondo!
-¡Ay! ¡Me la vas a sacar por la garganta! ¡Jajaja! – Valeria volvió a girar la cabeza y nos volvimos a besar. - ¡Qué rico es tenerte adentro, papito! ¡Ay, ay, ayyyy! ¡Acaboooo!
-¡Que rico, nena! ¡Qué lindo acabás!
-¿Te gustan mis orgasmos, papito?
-¡Muchísimo! – La solté por un momento y fui con la cabeza a su entrepierna. ¡No me la iba a perder!
	La pura exquisitez…, ¡nada más rico! Estuve más de cinco minutos chupando, lamiendo y besando su conchita. ¡Qué placer! 
	Como yo estaba relativamente doblado, para tener mi cuerpo cerca del de la ...