¡Como aprenden las estudiantes… y sus mamitas! - Relatos Eróticos

¡Como aprenden las estudiantes… y sus mamitas!

... el círculo que se formó en la izquierda… - ¡Les creo! ¡Jajaja! ¡Les creo!
	No nos quedaba otra. Nos reímos, y abrazados fuimos Sofía y yo a mi habitación. Cuando estábamos enfrascados en un gozoso 69 con Sofi, comprendí la extraordinaria suerte que tuve en conocer a una “HEMBRA”, con mayúsculas, como ella. ¡Jamás pretendía algo más de lo que yo le pudiera o quisiera dar! Además de culiar infinidad de veces, me facilitaba todo lo que yo quisiera, sean chicas o veteranas, solteras o casadas. Además de ser bellísima, voluptuosa y ardiente, es complaciente y delicada con los caprichos o deseos que yo pudiera tener. Lo que me decía de las mujeres que yo tenía oportunidad de coger, eran certezas sin exageración ni mala onda.  
	Mi idea y voluntad es el domingo pasarla tranquilo junto a Sofía, si ella lo quería así. Si quería hacer otra cosa, sola o acompañada, yo no voy a poner ningún reparo. Pero… Sofi no podía dejar de ser SOFÍA…
	Lamentó, no como reproche, sino comprendiendo lo “agotado" que yo estaba, que haya dejado de lado a varias de las chicas que querían “estar” conmigo. Un poco en serio, un poco en broma, le aseguré que yo prefería coger con ella en todo momento, antes de estar con algunas de las criaturas de la primaria. No sé si se lo tomó en serio, pero sonrió y me llenó de besos, sin dejar de darme una lujosa mamadita… Por lo menos 15 minutos estuvo mamando, hasta que descargué cuatro o cinco chorros de esperma en su boca. ¡Hermosa noche junto a Sofía! Tres ...

... polvos, uno de ellos con acabada en el culo, las respectivas mamadas de limpieza…, y mi gratificación, disfrutando de su concha, de su clítoris y de sus fluidos…
	Por el momento, yo calculé que en un par de días terminaba con el trabajo en la antigua estructura de la fábrica de aceite, que no era de 50 años como creían en la oficina, sino de 70, tal como me lo confirmaron muy antiguos habitantes de la localidad. Es un dato más, pero no obliga a prolongar el trabajo, desgraciadamente, teniendo en cuenta, además, que, en la central, piensan que para mí es una especie de castigo ser tan novato…, para ir a parar a ese pueblo… ¡Hermosa novatada!
	¡Me lo dijo Sofía! ¡Las mamás quieren su premio por dejar a las nenas en mis brazos! ¡No voy a ser egoísta! 
	En principio le dije a Emma… ¡se lo merece!

Emma, como la mayoría en ese pueblo “pampeano”, tiene atractivos rasgos criollos, piel canela, no más de 1,60 de altura, muy deseable, con sugerentes movimientos corporales, tanto caminando, como sentada o parada, sus curvas son detectables y deseables en todo momento. Ella lo sabe, y lo pone en evidencia cuando está dispuesta a responder afirmativamente a intentos de seducción…, como los míos…, por supuesto… Yo, “experto conocedor”, le daba 100 de tetas, como 110 de caderas…, con 70 centímetros de cintura, lo que hace la distribución corporal absolutamente apetecible. 
Amable y ligero vestido unitario, desde el escote a la rodilla…, aunque a estas no llega… Descubiertos sus hermosos ...