PRIMAVERA: La tercera edad como la primera. - Relatos Eróticos

PRIMAVERA: La tercera edad como la primera.

... mentiroso porque todos te dicen lo mismo y yo no puedo competir con esos ricachones… ¡Tienen más medios que yo para seducirte!
-¡Pícaro! ¡No sos adolescente! ¡No podés decir eso! Además…, desde el fondo de mi corazón, te juro que vos no necesitás ningún medio para seducirme…, a mí… y a cualquiera…
-¿Por qué no? ¡Todos los tipos andan atrás tuyo! ¡No puedo competir! ¡Pierdo como en la guerra!
-¡Jajaja! ¡Nunca me dijiste que andás atrás mío!
-¡Porque me da vergüenza! ¡Estás tan buena y tenés tantos pretendientes! ¿Qué puedo hacer yo?
-Vos sos la persona más dulce que conozco…, me gusta mucho estar con vos…
-¿De verdad? ¿Ahora estás bien?
-Ahora y en todo momento…
-Pero…, nunca me lo dijiste…
-Sonso…, sos vos el que tiene que decírmelo… ¡Vos sos el hombre…, yo la mujer…!
-Bueno, te lo digo… Espero que no te enojés… ¡Quiero estar con vos! ¡Solos, juntitos, muy íntimamente juntitos!
-Listo…, ya está… ¡Me lo dijiste! – Me tomó de la cabeza y me dio un suave beso en la boca. – Te beso suavecito porque estamos en público…
-¡Entonces vamos a donde no nos vean!
-¡Pícaro! ¡Qué propuesta la tuya! ¿Te parece bien decirle eso a tu abuelita?
-¿No es qué no sos mi abuelita? ¡Sos Tini, la más hermosa mujer que conozco! ¡Y no hablo solamente de las que conozco en vivo…, también me refiero a las que veo en fotos, películas… ¡ninguna está a tu nivel!
-¿Y los videos? Esos…, que seguramente ves… cuando andás… “apurado”, esas mujeres… ¿qué te parecen?
-¡Tini! ¡Preciosa! ¡Ninguna ...

... puede competir con vos, ni desde los cabellos a la cintura…, ni de la cintura hacia abajo… ¡Todas pierden!
-¡Mi bebé…, amorcito…! ¡Qué cosas lindas me decís! – Yo sabía que mi “abuelita” fue tentada en más de una oportunidad para intervenir en la “industria para adultos”, dado que había trabajado en varias oportunidades, hace 20 años atrás, en grandes hoteles, como “dama de compañía”. 
-Ya no soy un nene! ¡Vos lo dijiste! ¡No tengo 16! – Me tiré con todo. – Quiero tenerte en mis brazos… ¡Quiero que me tengas entre tus piernas! 
-¡Dani! ¡Las cosas que decís! – No está enojada, sólo sorprendida. – ¡Nunca imaginé que querías eso!
-¡Lo quiero Tini! ¡Sos tan hermosa! ¿Quién puede ser más bella que vos? ¿Quién tiene los maravillosos atributos que tenés…, tanto arriba como abajo de la cintura? ¡Quiero besarlos y acariciarlos! – Como en ningún momento mi abuela mostró ofensa o enojo, seguí con el avance. - ¡Si Tini, mi amor! ¡Quiero besarte y acariciarte toda!
-¡No grités! ¡Nos van a llevar presos! ¡Jajaja! – Mi abuela está contenta, Le encanta que su nietito adorado se sienta tan caliente con ella… - Vení, vamos a tomar algo y hablamos… 
-¡Tini, por favor! ¡Lo único que quiero tomar es tu cuerpo! ¡Y beberlo hasta morir!
-¡Nene! ¡No digas eso! ¡No quiero que te pase nada!
-Bueno…, entonces no me hagás morir de deseo… ¡Vamos al hotel! – Paré un taxi, que milagrosamente pasaba por allí. ¡El destino y el Señor me están ayudando! 
Tini no ofreció resistencia. Se cubrió el rostro y ...