PRIMAVERA: La tercera edad como la primera. - Relatos Eróticos

PRIMAVERA: La tercera edad como la primera.

... subió. Supongo que le importa disimular la diferencia de edad…, nada más…
Indiqué el mejor y más cerca hotel de la zona… En tres minutos estuvimos allí. El ingreso fue directo en la habitación.
Lo mejor de todo fue que ni siquiera tuve tiempo de pensar en desnudarla. Luego del interminable beso de lengua, mientras yo apretaba sus glúteos, Tini me bajaba el pantalón. Pantalón caído y ella mamando fue todo uno. ¡Nunca, nadie, jamás me había mamado así, con esa sabiduría! Su técnica profesional es única. 
-¿Tardás mucho en volver a acabar? ¡Quiero que me llenés la boca! – Tini fue imperativa.
Ante semejante calidad y experiencia, mi eyaculación no demoró más de 3 minutos…
-¡Bebé! ¡Qué lechita tan rica! – Tini utilizó lengua y labios para limpiar la pija con diligencia. – No te hagás problema. Esperamos hasta que estés nuevamente en condiciones. ¡Quiero sentirte acabar dentro mío! Como te darás cuenta, no tengo problemas de embarazo…, ¡y tenemos todas las horas necesarias…, para tenerte en todos mis agujeros…
-Bueno…, ahora me toca a mí…
Tini está de espaldas. Levanta las piernas y las pone sobre mis hombros. Apenas me agaché. Besé y mordisqueé sus muslos hasta llegar al centro del mundo. La exquisitez de esa depilada concha es absoluta. ¡Sabor y aroma únicos! Parece mentira… ¡nunca me hubiera imaginada que esta mujer, algo más de los 50, fuera tan sexualmente exquisita!
Probablemente estuve más de 15 minutos chupándole la concha. Sus gemidos de placer son apoteósicos…; ...

... fue cuando me sorprendió con tremendo orgasmo. ¡Nunca lo hubiera imaginado que a esa edad acabara como una de 20! ¡Genial! Sobre todo, para mi boca, que no da abasto para gozar de todo lo que llega a la garganta…, ¡Qué mujer increíble!

-Dani, mi amor, sos tan dulce y cariñoso… - Tini baja las piernas y me atrae con sus brazos hasta su rostro. Nos besamos con toda la pasión del mundo. ¡Es tan glorioso cogerla! - ¿Sabés mi amor? Tengo una vecinita que está justo para que vos le hagas el hoyito… Me hace acordar cuando yo era una nena y andaba caliente con el hijo del carnicero. ¡Me llevaba más de 10 años! Pero yo no dejaba de intentar que me cogiera… Le hacía todas las morisquetas posibles. El día que logré que me la metiera, me lo dijo: le daba miedo lastimarme, porque yo era muy chiquita… ¡Jajaja! ¡No sabía que las conchitas se estiran para toda pija! ¡Y vos también, mi amor! Recién estabas en el segundo año del secundario, cuando te vi cuando te cambiabas para la pileta del “tío” Carlos (les decíamos tío, pero era solamente amigo de toda la vida de la familia). 
Mientras Tini me habla, no deja de sobarme la pija y de ponerme sus pezones en la boca. ¡Le encanta que se los chupe!
-¿Querés que la traiga a casa…, como si nada…, y vos te la preparás? Me gustaría mucho ver cómo te la trancás…
Mi abuela tiene sus gustos: no solamente le gusta coger con jóvenes, sino que le gusta ver como se cogen a las nenas…
-Es que…, me gustaría hacerlo con vos…
-¡Por supuesto, mi amor! Te ...