El hotel - Relatos Eróticos

El hotel

... ninguna dificultad mi esfínter penetrando mi culo con ansia. 

Mi lengua hizo lo mismo minutos después yo también comí su culo su coño sintiendo aquel sabor fuerte que seguía manando de su interior fue una tarde apoteósica de sexo fue increíble disfruté muchísimo como tantas otras veces. 

Mujer: me ha encantado he disfrutado muchísimo y en ti está el poder volver a repetir. 

Yo: no tengas ninguna duda que tengo ganas de comerme otra vez este coño y este culo y tu boca y tus pequeños pechos he disfrutado muchísimo también. 

Mujer: la próxima vez me gustaría  que tu vulva no estuviese tan limpia me explico por supuesto que no quiero que esté usada por ninguna polla pero que tampoco la tengas tal aseada ya que me gusta el sabor fuerte de una almeja como te habrás dado cuenta la mía estaba así. Si me gusta evidentemente un culo bien limpio.

Yo dos puntos bien perfecto lo recordaré lo traer tan lustrado mi coñito. 

Por cierto no te apetecería darme último capricho. 


Mis labios besaron su boca accediendo a lo que fuese. 

Me gustaría que fueses a orinar. 

Me dirigí a hacerlo levanté mi vestido y comencé a orinar delante de aquella mujer sintiendo como sus ...

... ojos brillaban viendo aquella imagen sentí como por la postura en la que estaba aquel orín bajó algo mis piernas y incluso llegó a mis nalgas. 

Cuando me puse de pie aquella mujer comenzó a chupar mi raja y enseguida buscó hasta la última gota de orina había mojado mi piel .

Mujer: esto es lo que quiero sentir ese sabor. 

Me pareció algo increíble que aquella mujer quisiera sentir el sabor de mi orín pero a su vez yo también había comido un coño y aquellos pelos con sabor a poco limpio. 

Mujer: quieres probar. 


No sé en aquel momento en que pensaba pero me puse de cuclillas y ella se dirigió a la bañera dónde abriendo sus piernas levantando una de ellas comenzó a orinar viendo como todo aquel pus se iba mojando el momento que cortó su orín yo comencé a chupar aquella pelandrea sintiendo el sabor salado y fuerte del orín mi boca quedó abierta como pidiendo otra ración de orina cosa que aquella mujer entendió. 

Me fui hasta el hotel con aquel sabor salado de haber probado por primera vez orina sentía el vestido mojado con aquel líquido y su olor cuando entré en el hotel me crucé con mi marido queriéndome así no pudo pensar otra cosa que de dónde vendría......