1. Ahora somos amantes


    Fecha: 03/01/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Dulce Fuego, Fuente: CuentoRelatos

    ... sabía eso de ti. Y no me aburro para nada, el espectáculo es algo digno de verse
    
    -Bueno, no te enteras de más cosas porque no quieres, y tampoco e unes al espectáculo, nada más porque no quieres.
    
    -Jaja, no es eso, es que en serio, eso de bailar no se me da
    
    -¿Y qué piensas hacer? ¿quedarte ahí sentado mientras los otros nos divertimos?
    
    -Pues es mi mejor opción, es eso, o ir a un lugar que me gusta y que está aquí cerca, pero supongo que a ti no te laten ese tipo de lugares.
    
    Yo me entusiasmé pensando que subjetivamente se refería a un hotel, pero me decepcioné al darme cuenta que me llevaba a otro bar cuando le dije que si él quería lo acompañaba un rato -A ver qué tal se pone-
    
    -¿tomas cerveza?- me preguntó cuando llegamos a la barra de un lugar algo extraño pero agradable, una vieja casona donde en cada nivel ponían una música diferente, entre el punk, electrónica y pop británico. El sitio era frecuentado por pintorescos personajes con los pelos de colores parados en sendos copetes y usaban abrigos de cuero con púas. Luego subimos hasta uno de los pisos en donde ponían música ochentera, algo más tranquilo, así que me sentí muy a gusto, ponían música que me gustaba y además el volumen no era tan alto. Y sí, sí me gusta la cerveza.
    
    -De haber sabido que te gustan estas cosas, te hubiera aceptado la invitación nada más a ti, esto está muy bueno- Le dije a H.
    
    -Ah, pues es que hemos hablado tan poco, que no nos hemos conocido bien. Pero cuando quieras, ...
    ... venimos otra vez.
    
    -Sí, me gustaría. Pero déjame decirte algo antes, no sé cómo lo tomes, pero no me voy a andar con rodeos, a mi esas cosas me dan flojera. La verdad es que me gustas desde que empezaste a trabajar en la clínica.
    
    -...Ah... Bueno... perdón, es que no me lo esperaba
    
    -¿No he sido obvia este tiempo? ¡Rayos! te di mi número de teléfono el primer día ¡sin que me lo pidieras! me la paso entrando y saliendo de tu consultorio meneando el culo solo para que me notes, cada maldita guardia me abro la blusa para que se te antojen mis tetas ¿y vienes a decirme que no te lo esperabas? No sé si enojarme contigo o conmigo.
    
    -No, Dulce, no digas eso. Lo que pasa es que...
    
    -¿Qué pasa contigo? Dime, porque esto me está volviendo loca. Hace semanas que no dejo de pensar en la manera de acercarme a ti. Y tú, pareces de piedra. Hace rato prácticamente tuve que fajar con Alex enfrente de ti para llamar tu atención ¿Es que no te gusto ni un poquito?
    
    -Dulce, me encantas. Eres muy guapa y la verdad es que disfruto mucho de tu compañía y cada vez que entras a mi consultorio, tengo que aguantarme las ganas de besarte. El problema es mi mujer, el problema, Dulce, es que soy casado y le soy fiel a mi esposa.
    
    -Ah, con que es eso. Pues déjame decirte que la fidelidad a mí me vale madres ¡es un puto cuento! Pero, te entiendo. Te entiendo, pero no comparto esa estúpida y barata idea. ¿tomamos una más y regresamos con los chicos? Le dije a H. y luego vacié mi cerveza de un trago. ...
«1234...13»