La supervisora de limpieza y yo - Parte 3 (Final)
Fecha: 07/02/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: Shamurai, Fuente: CuentoRelatos
Bueno amigos, continuo con la última parte del relato de Gabriela la supervisora de limpieza y yo. Cuando el día de mi cumpleaños me regalo su culito virgen.
Me había convertido en el amante de mi supervisora Gabriela, el cual a mi edad de 19 años era toda una fantasía para mí, tener sexo con ella que era mayor que yo y volverle a despertar ese apetito sexual que tenía reprimido durante 8 años que llevaba divorciada. En el trabajo a veces me iba a buscar a los baños que me tocaba limpiar, buscaba cualquier pretexto para entrar a encontrarme y darme una rica mamada o chuparle las tetas o simplemente a besarnos mientras nos acariciábamos por encima de la ropa, eran minutos de intensa pasión en esos baños. Algunos sábados o rara vez algún domingo salíamos al hotel a darnos placer por largas horas, teníamos nuestro tiempo juntos sin importarnos nada más que coger y coger… El vello de su panocha era demasiado espeso, tanto que a simple vista no se le veía la raja, pero en una ocasión, que nos tocó ir a coger, me sorprendió mucho con su nueva ropa interior que me modelo como me lo había dicho la primera vez que tuvimos sexo, se había comprado un bikini negro de encaje con unos cordoncitos en forma de moño y el sostén era del mismo modelo, algo bastante sexy e inmediatamente pude notar que su panocha se veía con menos pelos, a lo que le pregunte ¿Gaby, te cortaste el vello? A lo que ella respondió ¡¡Sí, lo arregle un poco!! No lo depile todo, solo recorte, a ver si te gusta mi ...
... nuevo look. Le dije claro que sí, sabes que me gusta completita tal como estas y que te sigo deseando como si fuera la primera vez. Ella sonrió y me beso, agradeciendo mi comentario de cortesía y apoyo. Al quitarle ese día el calzón, pude ver claramente como recorto los pelos casi como unos 3 cm de largo y claramente podía verse la rajita ya empapada, deseando que mi lengua le diera placer y después mi verga. Le dí una rica cogida, quedando ambos satisfechos. Cuando terminamos nos quedamos en cama y ella me dijo:
Gabriela: ¿Dentro de 2 semanas viene tu cumpleaños verdad?
Paco: ¡¡Sí, ya casi cumplo los 20!!
Gabriela: ¿Y qué te gustaría que te regalara?
Paco: ¡Nada! Con tu compañía y estos ricos momentos, que más te puedo pedir, estoy satisfecho.
Gabriela: ¡Hay amor, que lindo eres! Y me dio un tremendo beso.
Gabriela: Pero, aun así yo quiero regalarte algo, ¿Cómo que te gustaría?
Paco: De verdad no es necesario, no gastas, además el mes que entre es navidad y pues necesitaras dinero para que le compre algo a tu niño y a tu mamá. Así que mejor ahórralo.
Gabriela: Sí, lo sé y eso he estado haciendo desde hace un par de meses.
Paco: ¡Qué bueno! Entonces no te preocupes por mi regalo.
Así terminamos ese día sin determinarle que quería de regalo, y pues en el trascurso de la semana, nos seguimos viendo en el trabajo y como de costumbre me fue a buscar a los baños para darme mi respectiva mamada, lo mamaba tan rico con una maestría que me hacía estremecer ...