Una semana como juguete sexual - Noche del sábado - Relatos Eróticos

Una semana como juguete sexual - Noche del sábado

... llegue al orgasmo aunque estaba bastante excitada, pero el sentir la corrida dentro de mi hoyito me dio ricas sensaciones que me dejaron casi al borde del orgasmo, me sorprendí porque sentí palpitar el pene del señor por al menos 30 segundos, realmente no sé si estuvo corriéndose todos esos segundos pero luego de que se detuvo dijo.

-“Uff…que rico…estaba muy acumulado…hace mucho tiempo…que no podía correrme dentro de una mujer…pero que rico culo tienes putita…espero que te guste el regalo que te di...”.

El vecino mayor no paraba de jadear, sostuvo su pene inmóvil dentro de mí unos segundos, mientras tanto me dio unas ricas nalgadas, bastante suaves y acompañadas de caricias en mi culo, luego de esos momentos sentí como empezó a retirar su pene lentamente, el pene del vecino mayor no era tan grande como el de don Daniel así que se deslizaba sin mucho esfuerzo por mi hoyito, pero inconscientemente yo apretaba un poco en cada respiración reteniendo su pene para no dejarlo escapar, finalmente lo saco y yo comencé a sentir como su esperma comenzó a deslizarse fuera de mi hoyito, apreté con fuerza para no dejarlo salir ya que me gusto la sensación de calor que me dejo, en eso don Ricardo le dijo.

-“Parece que ya entendió como usar el juguete vecino, le dejo los condones por si quieres usar la conchita, pero como le dije trátela como si fuera de porcelana, que pasen buena noche”.

Antes de alejarse don Ricardo se acercó a la valla y me dio un tierno beso en los labios, ...

... luego de eso se alejó y tomo su camino a casa, yo me quede sujeta de la valla unos segundos hasta que escuche a unos de los nietos del señor decir.

-“Llevémosla adentro abuelo, acá está muy oscuro, no se ve nada”.

Me tomaron de la cintura y de las manos para separarme de la valla, el nieto que había propuesto el llevarme dentro me dijo.

-“Vamos adentro, acá se pondrá más frio, lo pasaremos mejor dentro de la casa jeje”.

Yo le sonreí y le asentí sin decir una palabra, él se posiciono detrás de mí, con su mano derecha tomo mi mano derecha y con su mano izquierda empezó a darme suaves caricias en el culo, la follada de su abuelo me había dejado sensible y caliente así que el solo sentir su mano posarse sobre mis nalgas, me erizo la piel, el otro nieto tiernamente tomo mi mano izquierda, nos miramos fugazmente pero debido a la oscuridad tuve que quitar la mirada para ver por donde caminaba, ya que estando descalza sentía ramas y cosas que pinchaban mis pies, además el terreno era algo accidentado por suerte la casa estaba cerca así que en segundos llegamos a la puerta, antes de entrar el nieto menor que estaba manoseando mi culo me dijo.

-“Ahora te haremos sentir muy bien putita…jeje”

Yo solo me reí nerviosamente ya que el nieto parecía bastante enérgico, me recordó a don Nino con esa frase y por supuesto también me lo recordó ya que no dejo de tocarme el culo en ningún momento.

El vecino mayor entro primero, dejo la puerta abierta totalmente, luego el nieto ...