1. El deseo oculto (4)


    Fecha: 20/09/2025, Categorías: Gays Autor: RefRef, Fuente: CuentoRelatos

    La confesión de Raúl cayó como un jarro de agua fría sobre Iván, quien retrocedió un paso, rompiendo el contacto físico que aún compartían. Su mente intentaba procesar las palabras que acababa de escuchar mientras la adrenalina y el calor de lo que acababan de vivir seguían corriendo por su cuerpo.
    
    —¿María? ¿Tu mujer? —preguntó Iván, incrédulo, mientras su respiración aún estaba agitada.
    
    Raúl asintió, con su mirada llena de culpa y algo más profundo, quizás miedo a su reacción.
    
    —Sí, Iván… Lo siento, pero tenía que decírtelo. Esto que siento por ti no lo había sentido nunca, pero tampoco puedo dejar de lado la vida que llevo. Ella no sabe nada y… —Raúl hizo una pausa, frotándose la frente como si quisiera borrar todo lo que acababa de pasar—. No sé qué hacer con esto.
    
    Iván sintió cómo el cabreo comenzaba a crecer dentro de él, mezclado con el dolor y la traición. Había creído que lo que compartían era real, puro, pero ahora todo parecía teñido de una doble vida que no había imaginado.
    
    —¿Y qué esperas que haga yo con esto, Raúl? —dijo con un tono más alto, casi chillando, mientras recogía su ropa del suelo y comenzaba a vestirse rápidamente—. ¿Qué acepte ser tu… tu diversión secreta mientras sigues con tu “vida perfecta” con María?
    
    —No es eso, Iván. No quiero perderte, pero… Es complicado. Esto que siento por ti no lo puedo ignorar, pero tampoco sé cómo manejarlo —Raúl dio un paso hacia él, intentando calmarlo.
    
    Iván lo miró, ahora completamente vestido, ...
    ... mientras Raúl seguía desnudo, vulnerable y perdido. Hubo un largo silencio en el que Iván respiró hondo, intentando no perder el control.
    
    —¿Sabes qué, Raúl? Yo tampoco sé cómo manejarlo, pero no puedo ser tu escape, tu secreto. No soy eso, y no voy a permitírmelo. —Su voz temblaba ligeramente, pero había firmeza en sus palabras—. Si realmente me quieres, si de verdad esto significa algo para ti, tendrás que decidir. No voy a compartirte con nadie, y menos con una mujer.
    
    Raúl quiso responder, pero las palabras no salieron. Su silencio fue más elocuente que cualquier excusa que pudiera dar. Iván negó con la cabeza, sintiéndose abrumado, y salió del cubículo, dejando a Raúl ahí, solo, con su dilema. Cuando volvió al bullicio del restaurante, se sintió ajeno al ambiente festivo. Buscó su abrigo, murmuró una excusa a sus compañeros, y salió al frío de la noche. Caminó sin rumbo durante un rato, intentando ordenar sus pensamientos, pero solo podía sentir un dolor agudo en el pecho.
    
    Aquella noche, mientras se tumbaba en su cama, aún con el olor de Raúl impregnado en su piel, Iván tomó una decisión. No iba a permitir que lo que sentía por Raúl lo atrapara en una situación que lo hiriera más. Si Raúl quería algo real, tendría que demostrarlo, y eso significaba afrontar las consecuencias de sus elecciones. Por ahora, Iván sabía que merecía más. Y aunque doliera, tenía que protegerse, porque amar a alguien no siempre significaba quedarse.
    
    Han pasado unos días, y tras las ...
«1234...»