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Las mujeres de mi familia (IV)
Fecha: 23/09/2025, Categorías: Incesto Autor: VickySG, Fuente: TodoRelatos
... tanto si eran cosas ciertas o pura fantasía. - ¿Pasáis mucho tiempo leyendo? - Sí, aquí las siete solas no teníamos mucho que hacer. - Respondió mi prima. - Uxue, éramos seis. - Le contestó Uma. - Sí, tienes razón, me he despistado. - Dijo Uxue confusa. - Eso te pasa por no ir al cole, no sabes ni sumar. - Puedes leer el libro que quieras, pero no lo puedes sacar de la biblioteca ni decirle a mamá que te hemos enseñado este sitio. - Me advirtió mi hermana. - No, tranquila... si no me habla. - Eso es porque eres un hombre. - Aseguró Uma con desdén. - Bueno, chicas, os agradezco el descubrimiento. Si necesitáis algo de mí, no dudéis en pedírmelo. Desde aquel día, pasé todos mis ratos libres en la biblioteca, leyendo sus recomendaciones, algunas mejores que otras. Lo hacía procurando no ser visto, especialmente por mi madre. Mi abuela me pilló una vez entrando, pero no me dijo nada, como solía ser habitual. Aunque había prometido cumplir las normas, decidí llevarme un libro al desván, las noches se hacían muy largas hasta que me llegaba el sueño. Esa misma noche, utilizando la linterna del móvil, devoré el libro de me había llevado. Leí una página tras otra. Estaba a punto de llegar al final cuando escuché que alguien se acercaba. Debía ser Idoia. Leer estaba bien, pero no era mejor plan que follar. Me preparé para recibirla, pero llamaron a la puerta, algo que ella no solía hacer. Tras conceder permiso a la enigmática visitante, Uma y Uxue ...
... entraron en el desván. - ¿Qué hacéis aquí? - Dijiste que te podíamos pedir cualquier cosa, ¿no? - Preguntó Uma. - Sí, ¿necesitáis algo? - Queremos que nos enseñes otra vez tu pene. - Respondió Uxue. - Chicas, no creo que sea buena idea. - Por favor, nunca hemos visto uno. Solo el tuyo, pero estabas a oscuras. - Insistió. - Está bien. Tumbado boca arriba en el colchón, me bajé el pantalón de pijama, dejando que me vieran la polla. Ambas se agacharon para verla de más cerca. Uma fue la primera en atreverse a tocarla. Dio golpecitos con la punta de su dedo índice, pero Uxue la regañó. Acto seguido, la comenzó a acariciar, haciendo que aumentara de tamaño de inmediato. Yo permanecía inmóvil mientras mi prima hacía movimientos de mano cada vez con más sentido. Sin que nadie la hubiera enseñado, me estaba masturbando. Después se la pasó a mi hermana que continúo bombeando con ambas manos. Cada pequeño detalle las sorprendía, estaban descubriendo algo nuevo. Mientras Uma me seguía pajeando, me dio la sensación de que Uxue se acercaba abriendo la boca. La miré y asentí con la cabeza, dándole permiso para hacer eso que sus instintos le pedía. Sin que su prima dejara de menearla, la joven se metió mi verga en la boca. Le pudo el ansia y casi vomita al intentar tragar demasiado, pero no dejó de intentarlo. Cuando ya lo tenía medio dominado, quiso que mi hermana fuese partícipe de la mamada. Hubo un momento en que las dos repartían lametones a lo largo y ancho ...