1. El hijo mimado de mamá


    Fecha: 17/10/2025, Categorías: Hetero Incesto Sexo con Maduras Autor: Anonimo, Fuente: SexoSinTabues30

    ... cogérmela.
    
    – Espera… no… para… tranquilo, hijo… que impaciente… a ver, déjame a mi.
    
    Ya encima de ella, se abrió de piernas, me tomo la verga que estaba muy parada, y la dirigió hacia su abertura.
    
    Yo estaba desesperado, y ya hacia movimientos de cadera de metérsela antes de tocar su concha con mi verga.
    
    Ella se reía, y trataba de calmarme.
    
    – Ay, que inquieto… espera… asi no… para… todavía no… no, no espera, espera…
    
    Yo apenas senti sus labios mojados en mi verga, empuje duro hasta dentro.
    
    – Aaaayaaayyyy!! Dueleee!!!
    
    Cuando ya me di cuenta de que le dolía, ya la tenia ensartada hasta el fondo.
    
    – Para, hijo, para… estas yendo muy adentro…cálmate un poco!!
    
    Luego de un rato, sus quejido de dolor, se transformaron en gemidos.
    
    – Ahí…aaaah… asiii… no… movete mas asi… aaaaah, eso…que ricoooo… aaaah…
    
    Al escucharla gemir, la calentura se me fue por las nubes y eyacule enseguida.
    
    Mi madre se desilusiono un poco.
    
    -Ya tan pronto? Justo que se estaba poniendo bueno…
    
    Ahí cambiamos de posición, y mientras yo me tendí en la cama boca arriba, ella se acomodo encima mío, se volvió a meter mi verga que estaba media delicada y semi flácida, y comenzó a cabalgarme suavemente.
    
    Ella comenzó a gemir de nuevo y disfrutarlo. A mi me incomodaba un poco por que aun estaba sensible.
    
    Creo que fue su venganza por que fui muy bruto e impaciente al inicio.
    
    Encima podía sentir sus músculos apretándome fuerte la verga.
    
    Tras un rato, recupere mi segundo ...
    ... aire y mi verga se fue parando rápidamente.
    
    -Eso, mi amor… ponete duro para mi…
    
    Me hizo incorporarme, y me dio a chuparle las tetas, y a besarla de lengua.
    
    Sus caderas y su culo, sus nalgas, temblaban con cada sentón y embestida que mi mamá me daba.
    
    Durante lo que fue un par de horas, fuimos cambiando de postura, aunque no muchas. Cuando ella no me cabalgaba, nos poníamos en misionero, o de costadito, y luego lo mismo.
    
    Fue cuando ella estaba encima de mío de nuevo, que mi mamita comenzó a aumentar el ritmo.
    
    Paso de mover sus caderas de atrás hacia adelante, a moverlas de arriba abajo, dándome unos fuertes sentones.
    
    Con el calor, mis huevos bailaban al aire libre, y cada tanto chocaban con el culo gordito de mamá.
    
    Incluso ella contraria sus músculos internos, por lo que en cada sentón, yo sentía como pelaba mi verga de mi prepucio. Eso dolía un poco pero al mismo tiempo era la gloria. Y asi como no aguante mas, y acabe dentro de mi mami.
    
    Pero fue tan grande, que por un breve momento pensé que me estaba orinando en lugar de eyacular.
    
    Mamá sintió como me derrame mucho dentro de ella, y eso la hizo acabar también. Después como de 3 o 4 sentones mas, dio un gemido intenso y se derrumbo sobre mi.
    
    Esa noche nos quedamos dormidos.
    
    Amanecí cuando el sol me daba en la cara.
    
    Aun tenia esta rara sensación de que lo de anoche habría sido un sueño, pero el dolor en la verga, me lo recordaba.
    
    Además, la tenía toda pegajosa con los fluidos de la concha ...
«12...4567»