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Zorrita infiel y sumisa (2)
Fecha: 28/10/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Khanine, Fuente: CuentoRelatos
... marido sin enterarse de nada. Mientras comíamos Pedro dijo: ―Después de comer podríamos ir a montar –él tenía caballos allí. ―Si, dijeron los otros, es buena idea ―Si, dijo Miguel, yo todavía no he acabado y así Elena no se aburre, pero no tiene equipo adecuado. ―No te preocupes, le dijo Pedro, en las cuadras hay ropa que podrá ponerse. Terminamos de comer y nos dirigimos hacia las cuadras en coche. Miguel se echaría una siesta y luego seguiría trabajando. Al llegar bajamos del coche y pasamos dentro. Pedro me dijo: ―Toma ponte esto. Eran unas mallas negras, unas botas de montar y un chaleco de cuero que no se abrochaba. Las mallas resaltaban mi coño y mi culo y el chaleco no me tapaba las tetas. Ellos se pusieron pantalones de montar debajo de los que claramente se apreciaba que no llevaban nada. Los mozos de la cuadra alucinaron al verme y Pedro les dijo: ―Os gusta la yegua ¿verdad? La vamos a sacar para domarla un poquito, y lanzaron una carcajada. Yo no sé montar, por lo que me monté con Pedro, delante de él y salimos los cuatro a pasear. Mientras caminábamos, notaba como mis tetas se balanceaban y como mi culo se rozaba con la polla de Pedro, que se iba poniendo cada vez más dura. Con la mano libre me sobaba sin parar las tetas, el culo y el coño y yo le tocaba la polla que se había sacado del pantalón. ―¿Queréis un poco de zorra?, les dijo a los otros y así me hicieron ir cambiando de caballo y de jinete. Enseguida volvimos a las ...
... cuadras a las que yo llegaba montada con Alberto, que me había quitado el chaleco, me metía la mano en el coño y luego me hacía chupar sus dedos. Yo estaba tan salida que tenía manchadas las mallas de flujo cosa que ellos vieron cuando nos bajamos de los caballos. ―Fijaos como viene la puta, dijo Tomás. ―Ven que te vamos a montar a ti ahora -me dijo Pedro, mientras pasaba Alrededor de mi cuello un lazo de cuero, con el que me ató a una argolla de la pared, aunque como era muy largo, me dejaba libertad de movimientos. ―Quítate las botas, me ordenó. Y así lo hice. Me pusieron de rodillas y se acercaron. ―Bájanos los pantalones Se los baje y restregaron sus pollas en mi cara y en mis tetas. ―Cómenos la polla Empecé a chupársela alternativamente hasta que las tuvieron como palos. Pedro se puso detrás de mí y me bajó las mallas hasta las rodillas y empezó a meterme un dedo en el culo mientras yo seguía chupando pollas. Luego Alberto se sentó delante de mí, me cogió la cabeza y me la metió en la boca mientras Pedro me enculaba. Tomás se acercó y se puso al lado de Alberto. Se las cogí con las manos y les iba masturbando y chupando. Se fueron alternado los tres y me follaron el culo, el coño y la boca. Me daban azotitos y me decían guarrerías que me ponían cada vez mas cachonda: ―¿A que a tu maridito no se la chupas así? ―o ¿verdad que no te mete el rabo tan bien? Yo me corrí varias veces y ellos se corrieron en todos mis agujeros. Después llamaron ...