1. Incesto y perversión (11) madre/hijo


    Fecha: 28/11/2025, Categorías: Incesto Autor: Gabriel B, Fuente: TodoRelatos

    ... obedeció. Empezó por las zapatillas y luego por las medias empapadas, que hacían un ruido desagradable al ser retiradas de sus pies. Cuando volvió a erguirse, su mirada se cruzó con la de Virginia, apenas por un segundo.
    
    Ella lo observaba con mucha atención. Tenía las manos en la cintura. Llevaba una remera blanca, con finas rayas horizontales, que se ajustaba a su cuerpo, y que resaltaban sus generosos senos. El chico corroboró que no llevaba corpiño, pues los pezones se marcaban claramente en la tela. De hecho, estaban tan marcados, que se preguntó sin más bien no estaban duros. Eso podría ser por el frescor que entraba en el lavadero, o por una excitación compartida con él mismo. Y no eran solo sus pezones los que estaban marcados. La calza era tan ajustada que también le marcaban los labios vaginales.
    
    Adriel tragó saliva con dificultad. Intentó no parecer tan obvio, pero no era fácil.
    
    Virginia también se sintió tentada. Quiso mantenerse impasible, pero le costó un poco más cuando el chico empezó a sacarse la remera. Lo hizo lentamente, casi como si lo estuviera haciendo para ella. Primero levantó los brazos y dejó que la tela empapada trepara por su torso. El movimiento expuso una piel tersa, joven, sin un solo vello, con los músculos del abdomen marcados por la genética y el ejercicio. Tenía los hombros anchos, la cintura delgada, los brazos fuertes. Era como una escultura viva, una figura salida de algún sueño lujurioso. Le costó apartar la vista de su ...
    ... hijo.
    
    —Dale, el pantalón también —le dijo con voz neutra, como si no fuera nada fuera de lo común.
    
    De hecho, si ellos tuvieran una relación normal de madre e hijo, no lo sería. Pero Virginia estaba consciente de las interpretaciones que él le podría dar a semejante pedido.
    
    Adriel la miró con una media sonrisa, un poco incómodo pero también expectante. Se llevó las manos al cinturón, lo desabrochó, bajó el cierre y fue dejando caer la prenda lentamente hasta los tobillos. Se la alcanzó. Ella lo agarró, mirándolo durante un instante, para luego desviar la vista, fingiendo que no le provocaba nada verlo así, mojado, con el bóxer oscuro pegado al cuerpo. El miembro, hinchado por la erección contenida, se notaba inclinado hacia un costado, marcado como una provocación involuntaria. Virginia sonrió mientras le daba la espalda, fingiendo indiferencia.
    
    Colocó el pantalón en el lavarropas con parsimonia. Cuando se dio vuelta, él se estaba secando el cabello con la toalla. Después fue bajando por el cuello, los brazos, el pecho, el abdomen, todo con una lentitud calculada, como si estuviera definiendo sus músculos con cada pasada. Virginia lo observaba sin disimulo esta vez. Lo hacía como quien estudia una obra de arte.
    
    —El calzoncillo también —ordenó.
    
    Adriel vaciló un segundo. Luego sonrió. Se llevó las manos al elástico del bóxer y lo bajó con un solo movimiento. Su miembro, ya firme pero aún sin estar del todo erecto, cayó con un leve rebote, tan natural como inevitable. ...
«1...345...12»