1. Mi esposa follando con otro


    Fecha: 05/12/2025, Categorías: Infidelidad Autor: jairo leal, Fuente: CuentoRelatos

    ... entrar por una puerta lateral del edificio. Los seguí, ellos iban con rumbo a nuestra habitación, salí a los jardines y me acerqué a la habitación, conforme me acerqué más, pude ver sus siluetas a través de las delgadas telas de las cortinas livianas que llaman, ¡Se estaban besando!
    
    No más para ver que sucedía, me moví hacia la otra ventana que tenía las persianas abiertas y se veía hacia dentro con total claridad, pero no podía escucharlos, podía ver perfectamente a David y Stella a menos de 4 metros de distancia. Ella estaba sentada en una silla y David desde enfrente se inclinaba sobre de ella, besándole la frente y los párpados. Continuó besando su cara hasta llegar a sus carnosos labios y esta vez pude ver como pasaba su lengua sobre los labios de mi esposa.
    
    “Bueno, veremos qué pasa” pensé, creyendo que ella se pararía y se iría. Pero en vez de eso, volteó su cara hacia David y empezaba a decir algo, cuando el presionó sus labios sobre los de ella y podía yo adivinar que la lengua de él se deslizó en la boca de Stella. La vi entrecerrar los ojos y devolverle el beso.
    
    Se besaban apasionadamente, podía ver que él exploraba con la lengua la boca de ella que sacaba su lengua al encuentro de la de él. En un rato más ella era la que succionaba suavemente la lengua de él, que bajó su mano y empezó a pellizcarle suavemente un pezón.
    
    Ella le tomó suavemente por la muñeca retirándole la mano de su seno, pero él simplemente se agachó más y la deslizó bajo su falda para ...
    ... acariciarle los muslos. Stella separó su boca de la de él y viéndolo con cierto entusiasmo, supongo que le decía que no deberían estar haciendo esto. Podía yo verla sacudir suavemente la cabeza. Pero no se le veía molesta o incómoda.
    
    Él le acarició la mejilla y tomándola por la nuca se inclinó nuevamente hacia ella y pasó su lengua sobre los labios de ella repetidas veces hasta que logró que abriera nuevamente la boca y volvieron a juguetearse mutuamente con sus lenguas.
    
    Él volvió a aventurar su mano bajo el vestido, sin que ella tratara esta vez de retirarla, al contrario, separó un poco sus piernas, permitiéndole pasar más allá de sus muslos. Podía yo ver que él trataba de meter sus dedos en sus pantaletas para acariciarle el chochito. ¡Hombre! Mi verga estaba dura como de acero, me la saqué y empecé a trabajármela, pensando que pronto ella lo cortaría, o yo entraría en el momento preciso.
    
    Él se enderezó y me sorprendí cuando vi que se abrió la bragueta y se sacó la verga, la sostuvo con una mano y lo acercó a los adorables labios de mi esposa. Ella se echó atrás sorprendida, mirándola fijamente, pero él simplemente moviendo sus caderas acercó el glande hasta que empezó a pasarlo suavemente sobre los carnosos labios. La vi sacar la lengua y limpiar con ella la punta enrojecida, movió entonces la cabeza y dejó que todo el largo reposara junto a su mejilla. La vi que tenía los ojos cerrados y estaba hablando con él, quien mientras le contestaba también le restregaba ...
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