1. Mi esposa follando con otro


    Fecha: 05/12/2025, Categorías: Infidelidad Autor: jairo leal, Fuente: CuentoRelatos

    ... soportarlo y empezó a venirse convulsivamente. Su cabeza se meció hacia atrás y abrió la boca, ante el empuje de la lengua de él, que continuó lamiendo y lamiendo mientras ella se venía, hasta que ella lo forzó a retirar la cara de su sexo.
    
    Así como se retiró, se levantó aun sosteniéndola por las piernas y si hacer pausa se dejó caer sobre de ella y le encajó toda su verga profundamente en su chocho. Mis ojos casi se paralizan, mi verga estaba palpitando y se ponía cada vez más dura de lo que nunca había estado mientras veía yo a este joven enterrar su verga en el abierto coño de mi mujer.
    
    No le tomó mucho tiempo, él empujó las piernas de ella hasta atrás e incorporándose apalancó su verga dentro de ella hasta el último centímetro y empezó a venirse nuevamente. Demonios, nunca había visto algo tan excitante, pero mi cara ardía y la verga me dolía. Acababa de ver a mi esposa mamarle la verga a otro hombre y ahora él acababa de cogérsela a conciencia.
    
    Se quedaron ahí yaciendo abrazados sin moverse. Me regresé, subiéndome la bragueta y saliendo del jardín empecé a gritar “¿Stella… Stella?” Sabía que me escucharían desde afuera.
    
    Mientras le daba la vuelta a la puerta había gente caminando, una camarera tenía una charola con copas de champaña, tomé una, me la tomé de un solo trago y tomé otras dos. “¿Stella… Stella?” Volví a gritar y al acercarme a la entrada tomé las dos copas con una sola mano y abrí la puerta.
    
    Stella estaba nuevamente recostada en la silla. ...
    ... David ya no estaba. El vestido de ella estaba bien ajustado, sus sandalias nuevamente calzaban sus hermosos pies y supongo que su rezumante coño estaba cubierto por sus empapadas pantaletas.
    
    “Hola Cariño” dijo ella medio adormilada “Pensé que estabas con los niños y estaba tomando una pequeña siesta”. “Bueno” le respondí “Te tengo una agradable sorpresa, ellos no regresarán en algunas horas, ten, te traje champaña”. Ella tomó la champaña y yo le di un sorbo a la mía y decidí que la “pescaría” por haber hecho algo. “Me alegro que estemos solos aquí Cariño” le dije “Traigo muchos deseos de ti”.
    
    “Oh No” Dijo ella retorciéndose y tratando de escapar “No, no ahora no quiero, podrían vernos”, “No lo creo Cariño” le respondí mientras le subía el vestido y sujetaba sus pantaletas “Solo nosotros estamos aquí o quieres más compañía”. A ella se le cayó un poco de champaña, luchó y trató de mantener sus preciosas piernas juntas, mientras yo se las abría y me metía entre ellas, pero yo fui más fuerte que ella observando que no tenía pantaletas.
    
    “Voy a comerte este maravilloso coño tuyo, querida vas a venirte como nunca antes”, Le dije, mientras acercaba mi boca a su vulva.
    
    Mi plan original era abrirle el coño y encontrarlo lleno de semen, entonces acusarla de andar follando con otros y hacerle una escena para darle tratamiento completo. Miré su chochito y se veían los suaves labios llenos con una traza de crema entre ellos escurriéndole hasta el culito. Decidí entonces que podría ...