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Atrapados en el ascensor 4: madura morbosa
Fecha: 09/12/2025, Categorías: Sexo con Maduras Autor: VickySG, Fuente: TodoRelatos
... muñecos. - Solo te pido que le hagas una entrevista. - Está bien, que se pase el lunes a las doce por mi oficina. - ¿No puede ser en otro sitio? - Pues no, ¿por qué? - Porque Lía odia los ascensores. - Se tendrá que acostumbrar o nunca podrá trabajar para mí. Le dije que sí a mi hermana para evitar que siguiera insistiendo, pero no tenía ninguna intención de contratar a su amiga. Desde el principio tuve claro que no quería tener a mujeres trabajando para mí, y mucho menos recién salidas de la universidad, porque me conocía a mí mismo y podía terminar metiéndome en un lío. Volví para mi casa y puse un rato la tele. Estaban dando un programa de cotilleo y hablaban de que a una marquesa le había puesto los cuernos el chaval con el que salía. No estaba seguro de que Greta me hubiera sido infiel, pero me identifiqué con esa pobre mujer engañada. Decidí que ya había tenido suficiente por ese día y me fui a la cama. Domingo 3 de diciembre El móvil me despertó a primera hora de la mañana. Después de maldecir el día en que decidí hacerme abogado, cogí el teléfono pensando que era trabajo, que ni los domingos me dejaban descansar, pero era Greta. Con la habitual voz de niña buena que ponía cuando sabía que había metido la pata, me dijo que quería verme. Incapaz de resistirme a lo que parecía que iba a ser sexo seguro, le dije que se pasara por mi casa esa misma tarde. Podía haberle dicho que viniera en ese mismo momento, pero necesitaba pensar ...
... fríamente cómo iba a hacerle pagar sus desplantes. Además, al mediodía jugaba mi equipo de fútbol y era la primera vez en semanas que podía ver un partido tranquilo desde el sofá. Cosa que con ella presente no hubiera podido hacer. El día no comenzó demasiado bien. Tras el madrugón, no me quedó más remedio que ponerme a adelantar faena para así hacer un hueco para la entrevista a la amiga de mi hermana. Después pedí comida a domicilio, que llegó tarde y fría. Por si fuera poco, mi equipo volvió a perder, aunque la estrella hizo un partidazo. Eso me recordó que conocía a su representante, Jonás, y quería pedirle una camiseta suya firmada. Una vez se me pasó el mal humor por todo lo acontecido, me preparé para una tarde de sexo con ese volcán llamado Greta. Era experta en sacarme de quicio, pero también en darme unos orgasmos brutales. Solo tenía que agarrarme a su redondo culo y dejar que la energía de su juventud lo hiciera todo. Así era imposible dejarla. Cuando llamaron a la puerta fui corriendo para recibirla. Mi intención era llevarla de inmediato a la cama y follármela hasta que ya ni me acordara de que estaba enfadado con ella. Pero mi sorpresa fue mayúscula cuando vi que no venía sola. Greta entró en casa con tres amigas suyas y se fueron directas al salón. - ¿Se puede saber qué estás haciendo? - Hemos venido a ver una peli. - ¿Con qué permiso te traes a tus amigas? - Es que les he dicho que tienes una tele gigantesca y la querían ver. - Greta, sácalas ...