Clases Particulares 4 - Relatos Eróticos

Clases Particulares 4

... corto.

En la puerta me encuentro a Álvaro, el dueño. Es un hombre alto y fuerte, de pelo rapado y ojos inquisitivos. Tiene cuarenta y tantos años. Muy masculino. Le veo mejor que hace unos años, cuando trabajaba para él. Entonces estaba más fofo, más descuidado. Tenía problemas con su mujer. Ahora le veo más en forma. Me saluda muy afectuoso y me presenta a uno de sus empleados que está en la puerta. Dejo al resto de amigos entrar y me quedo un poco charlando con él.

- Ya me dijo Mónica que a lo mejor vendrías.

- Si, tenía ya ganas de conocer el nuevo local.

- Luego te hago un tour, ya verás cómo te gusta. Está mucho mejor que el antiguo. Solo faltas tu…

- Gracias, tengo un gran recuerdo de cuando curraba, pero estoy demasiado liada con la carrera.

Le doy un beso en la mejilla y paso dentro. Es espectacular. A la entrada un guardarropa y tras un ancho pasillo se entra en un espacio abierto con una pista de baile central. La cabina del DJ está al fondo y hay barras a los lados. En la parte izquierda hay un espacio con sofás y mesas para estar más tranquilo. Es como un teatro, hay palcos en la parte de arriba, con vistas a la pista. La iluminación es fantástica y la decoración top. Esta bastante lleno para ser jueves. Mi gente está esperándome y me llevan a la barra donde está Mónica sirviendo copas. Me hace pasar dentro y nos abrazamos. Lleva un top blanco y unos shorts vaqueros. Muy sexy. Nos bebemos unos chupitos de tequila y toma la sal de mi cuello, ...

... traviesa. Me rio, le doy un pico, salgo de la barra y voy al centro de la pista a bailar. Lucas está con Nieves y María está muy acaramelada con el amigo del pesado, que ha desaparecido. Así que me pongo con Rober. Suena reguetón y le perreo un poco. Me coge de la cintura y se pega a mi espalda. Uff, no sé si está empalmado, pero bien que le noto en mi culo. Me incorporo y recuesto sobre él. Contoneo mis caderas sin dejar de rozarle con el culo. Estoy juguetona. Y borracha. Acaricia mis brazos desnudos y siento su respiración en mi cuello. Lo besa. Luego Nieves me salva y tira de mi para bailar con ella. Cuando me giro al rato, veo que está con una morena. La chica quiere tema. Le habla al oído, lo agarra del brazo, le pone las tetas en la cara. Cruzamos miradas. Le guiño un ojo y vocalizo “a por ella” con una sonrisa. Mejor, que tiene un peligro…

Al rato el resto volvemos a por más combustible a la barra de Mónica. Está con Álvaro. Algo cuchichean y él se va a la cabina del dj. Mónica me mete dentro y nos metemos otro tequila. Esta vez no me corto y también lamo la sal en el hueco de su clavícula. Me agarra de la mano.

- Arriba – dice – y subimos a la barra. Empieza a sonar la mítica “I Kissed a Girl” de Katy Perry. Vaya encerrona. Era nuestra canción para bailar. Un foco nos ilumina mientras empezamos con la coreografía. Hacía años que no la bailaba con Mónica, pero la recuerdo. La gente empieza a silbar y veo a Lucas grabando con su móvil. Le mato. Mónica lleva la batuta ...