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La granja de semianimales de Sara - 2
Fecha: 15/12/2025, Categorías: Zoofilia Autor: secre, Fuente: TodoRelatos
... dos. De pronto, la vaca se arrodilla sobre las piernas delanteras, bajando el lomo, elevando aún más el culo y abriendo su sexo: te deja toda la abertura vaginal expuesta, hinchada, palpitante, brillante de fluidos y dispuesta a recibir lo que le des. El gesto es completamente sumiso, como si estuviera suplicando por más; esa vista tan obscena solo hace que te pongas más salvaje. La agarras con más fuerza aún, echando el cuerpo hacia adelante, asegurándote de llenarla al máximo en cada embestida. El cuerpo de la vaca vibra bajo ti, gimiendo, mugiendo largo y grave, completamente entregada al “tratamiento” y tú al placer bruto de follártela contra la paja fresca, con el granero como tu reino. Sara observa el espectáculo desde un costado, satisfecha, sabiendo que la granja va a ir hoy sobre ruedas… y tú, envuelto en ese calor brutal, te dejas llevar, saboreando la sumisión y la potencia de la bestia bajo tus manos La vaca mujer no está dispuesta a que aflojes ni un segundo. Cada vez que intentas separarte, ella te empuja de vuelta, moviendo esacintura enorme hasta encajarte de nuevo dentro. Si detienes el ritmo, te azota la cara con la cola, como exigiendo que sigas dándole lo que quiere. Es humillante y adictivo al mismo tiempo: la bestia te lleva a su propio ritmo, sin dejarte ni siquiera decidir cuándo parar. Te picas por dentro, así que agarras con fuerza loscuartos traseros, te pegas a su culo y empiezas a follarla con todo; tus embestidas son más ...
... profundas, más rápidas, con ese sonido crudo y sucio de piel chocando contra piel y eljugoso chorrear de su sexo empapado. El calor ahí dentro aumenta, la carne se vuelve todavía más blanda, húmeda, como si sus paredes se abrieran para acoger toda tu polla y exprimirla. Miras cómo su espalda se arquea, la vaca jadea, mugiendo grave y ronco, descargando en oleadas. Sientes las contracciones desbocadas de esavagina gigantesca alrededor de ti, cada vez más jugosa, caliente, con ese olor intenso que llena el aire del granero. La vaca se corre de forma brutal, los músculos interiores te envuelven, el cuerpo vibra bajo tus manos y la leche gotea de los pezones engordados. Has conseguido lo que Sara te dijo: una vaca contenta, tranquila, completamente descargada. Sara suelta una carcajada y deja caer la cabeza hacia atrás.—Bueno, parece que tienes mano… Ahora sí que va a dar leche por litros. ¿Ves cómo aquí el trabajo bien hecho tiene recompensa? La vaca aún mueve la cadera, satisfecha, esperando a que termines de sacar hasta la última gota. Ahora eres tú el que está a su merced… y lo sabes. Sara no pierde ni la postura ni la mirada burlona mientras se acerca a ti, elrabo de goma aún colgando entre sus piernas, ese bulto oscuro y desafiante balanceándose con cada paso. Se agacha a tu lado y te mide de arriba abajo, disfrutando de ver tu polla tú también empapada del jugo bestial y el sudor resbalando por tu cuerpo. Sin decir palabra, te pone una mano fuerte en la nuca. ...