El desmadre que se formó el día que la familia con - Relatos Eróticos

El desmadre que se formó el día que la familia con

... la noche me dijo Carmen que hiciéramos un receso que tenía que darle el pecho a su niña, y sin darme opción alguna se quitó la blusa quedándose con las tetas al aire, cogió a la niña y esta se amorro como una loca a su pezón, cosa que a mí me puso cachonda perdida, deseando en aquel momento ponerme en el sitio de Francisquita y comerme aquellas tremendas tetas de mi amiga. Y por si eso no fuese poco, llego jugando Santi y sentándose al lado de su madre intento mamar de su otra ubre, lo que obligo a Carmen a decirme riendo que por favor entretuviese a Santi hasta que acabase de mamar Francisquita. Cohibida, asustada y totalmente desconcertada, pues jamás se me había pasado por la cabeza tener ningún tipo de relación sexual con otra mujer, cogí a Santi y lo senté sobre mis rodillas, y el muy sinvergüenza, que desde ya tan pequeñajo era un depredador sexual, me trinco las tetas y sin darme opción me las saco de la blusa y me dio una mamada salvaje durante unos minutos, primero en una y luego en la otra, en los que Carmen no pudo contener su risa, más aún cuando Santi decepcionado dijo que yo tenía las tetas más grandes que su mama pero secas. Sin embargo, mis pezones se habían puesto más duros que el acero, pero no por la mamada del niño, sino por cómo me miraba las tetas mi amiga que consiguió que hasta me mojase las bragas.

-Nuestra amistad siguió, y aunque yo intente en muchas ocasiones ver si Carmen se ponía tan cachonda como yo cuando estábamos juntas, - dijo tras ...

... terminarse la copa de un trago – nunca me dio la más mínima opción, y yo que cada día estaba más loca por ella respete su postura, y sobre todo no quise alterarla para que terminase la carrera con la mejor nota posible. Ya en el MIR yo decidí hacerme cirujana, pues parecía que era muy buena en ese campo, y poco a poco nos fuimos distanciando, sobre todo por mi culpa, ya que no quería estar cerca de ella sin poder comérmela a besos.

-Ahora comprenderá Santi, - dijo cambiando su semblante algo triste con una sonrisa luminosa – y posiblemente también Julia, que en el momento que me entere que el amigo de mi novia, era el Santi que me chupo los pezones el día que me enamore de su madre, mis recuerdos me hicieron perder la cabeza, y me dije, “a su madre no te la follaste, pero a su hijo lo vas a exprimir, porque además el chiquillo está muy bueno”.

-¿Y ya está? – pregunto decepcionada Patri al comprobar que Mary daba por terminada su historia – No nos has contado cuantas o cuantos amantes tuviste hasta conocer a Julia, ni tu relación con ella, y mucho menos nos has justificado que hacías al lado de la casa de mi hermana cuando te ha puesto el mensaje Julia.

-Me parece que te voy a tener que volver a hacer cosquillas, - dijo Mary riendo – creo que eres bastante más lanzada que tu hermana, y también más curiosa. Nunca me había acostado con una mujer hasta conocer a Julia, y en ese tiempo tampoco con ningún hombre, estaba dedicada exclusivamente a mi profesión y solo cuando estaba ...