1. Me tiré a la peluquera de mi mujer


    Fecha: 29/12/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Alcon, Fuente: CuentoRelatos

    ... manera sutil varias veces, pasa cerca de mí y me roza con el culo, o me mira la bragueta con deseo.
    
    El último sábado le hice caso a mi mujer y estaba en la peluquería a las siete y media, no había nadie solo un papel en la puerta que decía así.
    
    -¡¡Estoy de viaje, no peino hasta el lunes «nos vemos»!!
    
    Visto el cual me marche calle abajo y al poco me cruce con Miranda que volvía arrastrando una gran maleta.
    
    -No volvías el lunes –dije.
    
    -Ya está, ¡por fin!, divorcio terminado ¡Anda ayúdame con la maleta hombre! -dijo feliz.
    
    Llegamos a su casa y me hizo pasar.
    
    -Mientras me ducho, ¡quieres preparar unos cafés Juan!
    
    -Claro Miranda.
    
    (El letrero de ausencia lo dejo en la puerta diciéndome ¡Hoy descanso!)
    
    Salió de la ducha con solo una camiseta que le llegaba al filo del chocho, el cual se veía «peludo» asomando «el bigote» de rizos por el filo de la camiseta; tan sensual como siempre pero casi desnuda, se sentó junto a mí a tomar el café y se desahogó contándome.
    
    -Juan yo nunca engañé a mi marido y antes de él yo era muy recatada, después de él tenía miedo de otro chasco -me dijo al tiempo que cruzaba las piernas y dejaba a la vista su peludo coño.
    
    -Yo tampoco he engañado nunca a mi mujer, pero me deja follarla pocas veces -dije mirando su liebre peluda.
    
    -¡Tengo curiosidad Juan! ¿Tú cómo andas de polla jajaja? -dijo calentona como una zorra.
    
    -Pues, ¡demasiado grande!, dice mi mujer, ¡un pollón de veinticinco centímetros! ¿Quieres verlo? -la ...
    ... anime
    
    -¡Por dios que vergüenza Juan!, ¡qué diría tu mujer si nos viera aquí en la sala de peluquería!
    
    -¡Nada!, ojos que no ven… -dije firme.
    
    -¡Venga sácate el pene que lo vea! ¡Que no he visto uno hace ya ni me acuerdo!
    
    Desabroche mi pantalón y lo baje junto a con los slip hasta las rodillas.
    
    ¡Mi pene «falto de acción» salió como un resorte tieso para arriba! ¡Veinticinco centímetros de polla!, que miraban a Miranda como lanza de caballero medieval.
    
    Miranda abrió la boca, y «sin preguntarme siquiera» se tragó medio nabo, (mas no le entro), se movía con agilidad. La saliva le chorreaba por la barbilla, a la vez atrapo mis huevos con una mano y los apretó como si me quisiera castigar, la cogí por el pelo y le metí el pene ¡¡más adentro!! ¡Miranda parecía un pez globo con la garganta y los carrillos inflados!
    
    Saque la polla de golpe y mientras a ella le caía un chorro de saliva de la boca me coloque tras de sí y la agarre por las caderas y le metí el rabo en su coño peludo «entero», ella dio un grito de placer ¡Veinticinco centímetros de polla que entraron como la seda!, le chorreaba líquido patas abajo como a una perra en celo, ¡acelere las embestidas!, y mientras me la follaba intensamente los labios y los pelos de su coño bailaban plegándose; como un tomate de mar golpeado por la marea.
    
    Me corrí dentro de su coño en una embestida que aplasto mis huevos contra sus cachetes ¡Ella gritó al notar como mi pene se tensaba en su interior «escupiendo» mi semen ...
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