1. Jubilados


    Fecha: 15/02/2019, Categorías: Confesiones Autor: pedrocascabel, Fuente: RelatosEróticos

    ... culturista inglés, alto, guapo, muy rubio, ligón mimado por todas las mujeres de por aquí, verdaderaestrella de la playa, está arrodillado rodeado por tres hembras que llevan puesto un arnés sujetando una polla de silicona, todas de buen tamaño. La del consolador más grande le empuja para que quede a cuatro patas y penetra el culo de Gary tras untarle una buena cantidad de lubricante a la polla falsa de color negro. Entra con cierta facilidad, aunque el guapo inglés se queja y da unos grititos que me parecen muy maricones, quizás de excitación. Otra de las mujeres le mete en la boca una polla roja algo menor que la que está enculándole, mientras la tercera en discordia acaricia suavemente la gruesa polla del inglés con manos y boca, aunque de momento el éxito no le acompaña, no está demasiado tiesa. Este grupo continuará hasta que las tres hayan penetrado el culo de Gary.
    
    —¿Te gustaría que yo te penetrara con un consolador?, seguro que me pondría cachonda
    
    No he contestado aún a Nicole cuando dice:
    
    —Creo que deberías quitarme ya las bragas, Marty, las tengo muy mojadas
    
    Dicho y hecho. Es verdad, Nicole está excitada y húmeda, perfecto. Nos besamos durante un buen rato al mismo tiempo que no dejamos de tocarnos, de meternos mano por todo el cuerpo. Nos hemos alejado un poco de losnumeritos que se montan los holandeses y el inglés, y estamos tumbados sobre una colchoneta de gomaespuma. Me excita sobremanera comerle los pezones a estas tetas tremendas —me ha pedido que ...
    ... no le quite el sujetador para que estén bien enhiestas— y oír los gemidos, los grititos que da, dejando claro que está muy cachonda. Como siempre, al poco rato me urge a ocuparme de su culo, por lo que se pone en postura de perra —no había visto hasta este momento que se ha puesto un pequeño tatuaje no permanente justo encima del comienzo de la raja de su culazo, dos flores rojas entrelazadas— para que pueda lamer, arriba y abajo, la ancha raja marrón, deteniéndome en la entrada del ano, punteándolo con la puntita de la lengua, haciendo intención de entrar, hasta que sus ruegos y lloriqueos me llevan a empujar y meter mi lengua lo más dentro que puedo, moviéndola a derecha e izquierda, arriba y abajo, dentro y fuera, durante varios minutos. Cómo le gusta.
    
    He sido previsor y en un bolsillo de la camisola he traído un frasquito de suave lubricante que extiendo por toda la polla. Es fácil penetrar el culo de esta hembra, simplemente empujo de manera constante hasta que mi grueso capullo supera la resistencia de los esfínteres, y tras escuchar el débil quejido que siempre da, aprovecho el suave movimiento adelante-atrás que comienza Nicole para terminar de meterla entera. Enseguida empiezo unmetisaca profundo, lento, durante un buen rato, sin llegar a sacar la polla del todo, y ambos acompasamos nuestros movimientos.
    
    Una vez la mujer empieza con su soniquete deayayay, señal que quiere más marcha, me sujeto con fuerza a la cintura y las caderas, ella levanta aún más el culo ...