1. EL VECINO 1


    Fecha: 08/10/2025, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Berlith, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... vendrá.
    Y así fue, ya me estaba recuperando, pero no de la vergüenza. Creo que fui muy apurada en las cosas.
    —voy a llamar a la ambulancia —dijo, pero me negué. No quería ese coro de chismosas hablando sobre nosotros. Me ayudo a llegar a mi dormitorio y me acostó.
    —Siento mucho lo ocurrido —le dije acongojada por lo sucedido. —no sabía que tuviera este problema tan grande.
    —No se preocupe —me consoló palmeándome la mano —yo también lo tuve. Son cosas reprimidas dentro que buscan su momento en salir. Son cosas que ningún masajista te lo quitara sino lo hablas. Como en este caso. Necesitas un masajista mental y no hay como tú para abrirte. Así que bótalo todo, te oiré.
    Y, con miedo seguí relatando. En algunas partes nos reíamos y empezábamos a bromear sobre nuestras historias. Ambos estamos muy comprometidos con el futuro de nuestros hijos, aunque él no temía cuando se fueran yo le expresé mi tristeza ante ese horizonte que ya empezaba a caminar. Hasta que vio la hora en su celular e imagine que llego el final. Así que le pedí que se quedara conmigo. Mire sus ojos como de alma a alma.
    —¿Cómo me veras mañana? —pregunto pasando su dedo por la línea del destino de mi mano. —No sé si te importara lo que digan de ti, pero a mí no. Para ellos seremos como la bella y la bestia o algo parecido. Ya estoy acostumbrado, pero tú eres una dama —Uy me estaba mojando por esas palabras que expresaban preocupación por mi reputación.
    —No me importa! —le dije intempestivamente ...
    ... aprisionando su dedo que paseaba por mi mano. —estoy sola. Armemos un teatro, déjamelo a mí. —dije emocionada por la sensación de la aventura de montar una escena para seguir la relación que recién había plantado —si estas preocupado por mi honor, claro —le agregue mirándole a los ojos esperando su complicidad en el asunto.
    —La dama y el vagamundo —dijo el nombre de una película riéndose por nuestro caso. —veamos hasta donde llegamos. —y medio un besito de piquito y siguió al confirmar mi aceptación con uno como Dios manda. Sentí su lengua juagar con la mía propiciándome un sentimiento olvidado que respiré melancólica.
    Dios mío. Me sentí poseída por su toque y sus besos. Otra vez sentí ser querida, cuidada, protegida. Bese su cuello y ayude a abandonar su casaca, como si le quitara la armadura de mi caballero protector que me llevara de regreso a esos recuerdos olvidados. Me estaba excitando de tal forma que no había comparación con algo pasado y que ya había olvidado. Desabroche su cinturón mientras nos besábamos a ciegas, y me sentía como si fuera mi primera vez con un hombre. Andrés me levanto el sueter descubriendo mis senos que toco antes de devorar uno de mis pezones erectos. Mi cuerpo se contraía por cada toque de sus manos sobre mi piel. Finalmente quedamos desnudos, el parado a lado de la cama y yo sobre la cama en cuclillas exponiendo mi desnudes ante sus devoradores ojos. Espero gustarle ante sus aguileños ojos que volaban por mi cuerpo, por favor dime algo que soy digna, ...
«12...567...»