Historia de dos hermanos
Fecha: 11/10/2025,
Categorías:
Incesto
Tus Relatos
Autor: Berlith, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... abrirse de piernas. Hasta allí veía. Mi hermano estaba sufriendo sobre la cama. Y quería reconfortarlo para que se sintiera bien. Así que me acerque a su pene y lo chupe como hacia mama.
—que haces Isa¨? —pregunto asombrado aun echado.
—trato de acerté sentir bien como lo hacía mama —concluye. Regrese mi atención de nuevo y empecé a ver su punta. Parecía una pepa de palta rosácea de la cual en sus bordes salía pequeñas espinillas y granitos el resto era forrado por enervaciones como raíces que bajaban hasta su base. Chupe y tenía sabor salado y su aroma era peculiar, deslice mi boca en esa pepa hasta llenar mi boca. Trate de balancearme como hacia mama, pero chocaba hasta mi garganta. Use mi lengua y sobaba con ella su pepa. Su pene se paró más y me parecía que crecía de ancho. No sabía si lo sentía bien mi hermano hasta que le pregunte y me dijo que no le tocara con mis dientes. Trate de nuevo y si parece que se relajó. Hasta oía sonidos guturales de él. Comencé a subir y bajar mi boca con su pene dentro. Y decía Ah AAh Ah Ah, creo que estaba haciéndolo bien. Y seguí frotando mi lengua en su pepa, bajando y subiendo hasta que dio una fuerte exclamación seguida por una inundación en mi boca. Trate de tragarla, pero fue mucha. Vi que le seguía saliendo disparada al aire y chorrearse por su pene y a lado. Seguí esta vez lamiéndole su pene y chupé esa baba blanca que emanaba de su punta. Que caso tenia. Su sabor me recordaba a pescado y lo chupe todo como hacia mama. Hasta que ...
... no quedo nada fuera. Volví a chupar, pero se ablando. Intente, pero ya no salía nada. Ahora me tocaba abrirme de piernas, pero él estaba echado. Imaginé otra posición y me senté sobre él. Pero su pene estaba desmayado creo. Tratando y tratando solo pude hacer que su pepa me frotara mi entrada donde papa me lo metió. Solo esperaba que no me doliera. Después tomo forma endureciéndose y pude meterlo. Si dolía poquito y me senté poco apoco hasta que pude asentarme sobre su pelvis. No lo negare me gusto sentía algo nunca antes experimentado. Cada movimiento que hacía para acomodarme me… me…
—Dios, no se —dije con los ojos cerrados. Trate de sacarlo, pero al instante me embargo en mi cuerpo esa sensación indescriptible esta vez regrese a mi anterior posición e igual. Sacará o metiera me sentía bien. Hasta mi respiración cambio a agitación.
—estás bien Isa¨—pregunto José agitado.
—Sí, estoy bien —le respondí tratando de no perder la ilación que tenía. Apoye mis manos sobre José y levante y bajaba mi ojote. Me estaba transformando, seguí y seguí —Oooh Dios!, Ah!, AAh!, UMH!, uuumh!, si quiero más! —gemía y mi hermano no se quedaba en estas nuevas sensaciones que ambos disfrutábamos. — te sientes bien? —pregunte.
—sii —respondió algo raro y seguimos. Hasta que mis piernas se cansaron del ejercicio. Me tumbe sobre José, creí que hasta aquí llegaría, pero mi hermano tomo el control y siguió metiendo y sacando se pene de mi interior.
—Aaaaaah aaah uuuuhm ah aah aaah oh auuuh —gemía ...