1. A los pies de Laura


    Fecha: 21/04/2019, Categorías: Infidelidad Autor: Dany, Fuente: CuentoRelatos

    ... cristalinos ojos azules, y comienzan a descender por sus mejillas dejando un débil rastro húmedo. La cámara, entonces, comienza a alejarse para terminar mostrando la silueta del exquisito cuerpo desnudo de Karen contra la claridad de la mañana introduciéndose por la ventana. Mientras esto ocurre, para concluir el drama, se empiezan a escuchar las notas del tema musical:Un instante de amor (A moment of love). La película es una excelente superproducción dirigida por Broody Wallen.
    
    Cinco días después me encontraba manejando mi coche en camino a la casa de montaña de mi tío Alberto, el padre de Evelyn. Por el camino caí en la cuenta de algo que hasta la fecha no había capitalizado, y es la gran cantidad de vallas y anuncios publicitarios haciendo referencia a los pies de las chicas:
    
    Si quieres mantener suave la piel de tus pies usa todas las noches: Creampie.
    
    ¡Sedúcelo! utilizaSuave pie.
    
    Que tus pies luzcan encantadores conTender Foot Cream para que tu chico se enamore más de ti.
    
    ¡Retenlo! deja que él acaricie la suavidad de tus pies, y quedará embelesado de ti.
    
    Utilza Fondly CreamCaress para mantener tus pies seductores…
    
    Todo esto sin contar con los anuncios de ridículos zapatos, también “para que los pies de las chicas de la nueva era, luzcan seductores.”
    
    Más adelante encontré una valla comercial que me hizo sonreír:
    
    Para medidas precisas en sus proyectos, Blue & Decker le recomienda el Pie de Rey de titanio: DigitalV…
    
    Como quiera que fuese, ...
    ... parecía haber en el ambiente una chiflada obsesión por los pies.
    
    El coche avanzaba por la carretera. La idea de ir camino a la montaña me entusiasmaba, pues estaría retirado del bullicio de la ciudad, aunque, debido a que mis primas eran también bastante ruidosas, yo había elaborado mis propios planes para irme diariamente de excursión a los bosques aledaños, y practicar al mismo tiempo un poco de senderismo. Mientras mi mente iba de un lado a otro pensando en lo que haría cuando estuviera en aquel sitio, el coche se iba internando poco a poco en el ambiente montañés: cielo azul despejado, pinos, verdor y brisa fresca. Pronto, y casi sin darme cuenta me encontré ingresando en la propiedad de mis parientes. Gumersindo, el guardián, me recibió y me dijo que mis primas todavía no habían llegado, lo cual era bastante obvio, pues los coches de ellas no se encontraban estacionados en el sitio utilizado para estacionamiento. De manera que decidí, en aquel preciso momento, hacer mi primera incursión por las sendas y bosques aledaños. Le di un vistazo a mi reloj de pulsera y observé que eran poco más o menos las diez y media de la mañana, lo cual me permitiría perderme en la naturaleza unas cuantas horas antes de la puesta del sol. Así que alisté una mochila con algunas cosas para comer, además de agua y un refresco de cola; me la eché a la espalda y cogí, además, la pequeña maleta con mi cámara fotográfica y el teleobjetivo. Llevaba también a la mano mi brújula analógica, pues, aunque ...
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