1. Sexo con el nieto de la segunda esposa de mi abuelo


    Fecha: 15/05/2019, Categorías: Hetero Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos

    ... pellizcaba mis pezones. El beso fue largo, grato…; cómo llegaba el puto maricón hasta mi garganta. Comencé a pensar cómo meterme la polla que notaba por encima del short de nylon, la supuse grande y esponjosa. Ya sentí deseos de meterme esa polla y me dediqué a abrir la cremallera de su short y se acordó:
    
    — Vamos rápido que se va a descongelar todo lo que he comprado.
    
    Nos sonreímos y llegamos a la casa. Me indicó que le ayudara a dejar las cosas en la cocina, que su abuela lo guardaría todo y él me presentaría a su abuela. Me pareció bien, me presentó, me dio dos besos húmedos en cada cara, me dijo que era mi tía Juliana y así se me quedó de momento. Luego Lorenzo fue a ver a mi abuelo y nos hizo pasar al salón, me reconoció y me abrazó. Luego dijo:
    
    — Lorenzo, ya tienes compañía, acomódalo donde quieras…
    
    — En mi cuarto hay mucho espacio, tío.
    
    — He dicho donde quieras, —respondió mi abuelo que sabía el doble de la mitad.
    
    Así que nos metimos en su cuarto donde había una cama de las llamadas de matrimonio, suficiente para los dos. Me mostró el ropero y me dijo que dejara mis cosas en la parte de la izquierda. Como no llevaba tanto, metí la mochila.
    
    — ¿Para cuantos días vienes?, preguntó.
    
    — Casi cinco…
    
    — ¡Qué pena!, ¡joder! esperaba que vinieras para dos o tres semanas…
    
    — Llamaré a mi padre para saber qué piensa, dije para consolarlo.
    
    — Tu abuelo siempre habla de ti, casi todos los días me cuenta cosas tuyas de cuando eras pequeño, pero hace ...
    ... unos días que anda algo triste y me preocupa; si te quedaras más tiempo…
    
    — Hecho; se lo diré a mi padre, pero piense lo que piense de aquí no me voy hasta que no me echen.
    
    — Vamos a mostrarte todo.
    
    Llegamos a la parte trasera de la casa y descubrí una piscina, limpia, agua azul, con motor para hacer circular el agua. Me iba explicando que mi abuelo había hecho esta piscina para que sus nietos vinieran a verlo, pero de ocho que tiene no viene nadie, que yo había ido hace once años, que entonces no tenía piscina. Que varias veces había llamado a sus cuatro hijos, pero nadie se decide a ir a pasar unas vacaciones con él. Me dio pena y me prometí a mi mismo que vendría todos los años.
    
    Luego me llevó al bosque, nos tumbamos en un claro, mirando las copas de los árboles y el cielo azul. Lorenzo puso su mano derecha sobre mi short encima de mis genitales. Yo le imité, pero al momento me saqué mi short para que me sobara la polla y los huevos. No fue perezoso y se quitó su short de baño. Nos dimos media vuelta, nos pusimos de frente y nos besamos, nos enredamos a besos y me atravesó con su lengua toda mi boca. Me gustaba su sabor, su saliva, su lengua, el tacto de sus manos. Se movió sin ponerse de pie y me hizo un 69, me mamó la polla y me la puso dura, mientras yo le preparaba su culo, metiendo la lengua y de vez en cuando las yemas de los dedos. Cuando le había metido el dedo índice lo sentí gemir y al meterle la lengua se removió todo su cuerpo como si hubiera tenido ...