1. Incesto tras incesto


    Fecha: 29/05/2019, Categorías: Hetero Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos

    ... dijo dónde estaba el clítoris y cómo lamerlo y chuparlo, lo que eran los labios mayores y menores y como lamerlos, la vagina y como follarla con la lengua. Cómo lamer y follar el ojete, donde estaba el periné... La lección duró más de media hora y no duro más porque enseñándole cómo le gustaba más que jugase con su clítoris, exclamó:
    
    -¡¡Y así se corre una mujer!!
    
    Esteban vio cómo su tía jadeaba y se convulsionaba y cómo acababa de correrse con las manos en el coño y en posición fetal.
    
    María tenía una sonrisa de oreja a oreja cuando acabó de correrse. Descansó un par de minutos, durante los cuales no abrió la boca más que para respirar. Recuperada, le dijo:
    
    -Desnúdate que ahora voy a enseñarte a follar.
    
    Se desnudó. María, al ver la polla empalmada y mojada no se pudo resistir, la cogió y le hizo una mamada. No tuvo que esmerarse mucho. Unas chupaditas, unas lamidas de periné y ojete, unas lamiditas de pelotas, y de la polla de Esteban salió un chorro de leche que casi llega al techo. Fue la única leche que se perdió, el resto se lo tragó María.
    
    La mujer pensó que se le iba a bajar, pero la polla seguía dura como si no se acabara de correr. Fue a lo suyo:
    
    -Follar no es solo meter y sacar, Esteban, bueno en el culo, sí, con menos o más rapidez, o con más y menos fuerza, follar es... Échate encima de mí y métemela. -se echó y se la metió- Ahora no te muevas y bésame -se besaron unos minutos- ¡Joder qué bueno estás! Mejor no te digo nada y vete aprendiendo ...
    ... mientras follamos.
    
    Esteban, se envalentonó y le dio a su tía, le dio duro, y le dio suave y se la quitó y se la comió... Y la tía lo cabalgó al galope, al trote y al paso, y se la quitó y se la chupó... Y ella se corrió seis veces y Esteban le llenó el culo de leche tres veces... Y quedaron para hacer el trío.
    
    Esteban seguía sin saber si era de carne o si era de pescado.
    
    Finales de agosto de 1971.
    
    Esteban había cogido el tifus. Eran las once de la noche y estaba en cama sudando y tiritando. La hermana de su abuelo, Matilde, una mujer de cincuenta y cinco años, se metió en cama para darle calor. Esteban se abrazó a ella y le puso las manos sobre las tetas, que eran grandes y fofas. La polla se le puso dura. Esteban, poco después ya no temblaba. Matilde, al sentir la polla en su culo, se puso cachonda... Haciendo que se acomodaba, echaba su gordo culo hacia atrás para provocarlo. Esteban, le subió el camisón y le bajó las bragas. Le hizo con el dedo en el ojete lo mismo que le había hecho su tío a él. Matilde se dejaba. Probó a ir más lejos. Metió la cabeza debajo de las sábanas y le lamió el ojete. La mujer se encendió, y le dijo:
    
    -Mete la punta de la lengua dentro.
    
    La metió y supo a que sabía... Sabía a lo que sabía.
    
    Matilde echó el culo para atrás y le folló la lengua... Esteban le echó la mano al coño y se encontró con una charca de jugos. Matilde le cogió la mano por la muñeca, la llevó a la boca, se la lamió por ambos lados, se puso boca arriba, y le ...
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