1. El cuñado (Final)


    Fecha: 14/06/2019, Categorías: Gays Autor: angelmatsson, Fuente: SexoSinTabues

    ... puso las manos sobre ti?! –gritó. Respiró profundo y continuó-: Quítate la ropa. -Me quiero ir –dije con miedo. -Y yo quiero que te quites la ropa –me miró furioso-. Quiero ver que más tienes que ocultar. -Llévame a casa –pedí. -¡Que te quites la puta ropa! –rugió. Me estremecí. No me quedó otra opción que sólo obedecer. Temblando, fui sacándome las prendas de ropa que llevaba encima. Él me inspeccionó con suma atención, y mientras más veía, más enfurecido se notaba. Tenía pequeñas marcas en mis hombros, espalda y en mi culo. La mayoría eran casi invisibles, pero su ojo no consiguió ignorarlas. Casi salía humo de sus orejas cuando me habló: -¿Quién? –preguntó demandante. -Me quiero vestir… -susurré. -Respóndeme, Diego –dijo intentando controlarse. -Por favor –rogué-. Me quiero ir. -No hasta que me digas todo –se sentó sin despegar sus ojos de mi cuerpo temeroso e intimidado. No sé en qué estaba cuando decidí ir con él. Ahí se notaba lo inmaduro y tonto que era, al no pensar en las marcas que tenía mi cuerpo-. Habla. Quiero saber quién, dónde, cuándo. Todo. Necesito saber quién fue el que profanó lo que era mío. Porque eres mío. Y manchó tu cuerpo… ¿Quién fue? -Nadie –dije. Daría mi brazo derecho si era necesario por resguardar a mi hermano. -No ganarás nada mintiéndome, Diego –dijo con una sonrisa seca-. ¿O pretenderás que ese chupón en tu culo te lo hiciste tú mismo? -Llévame a casa –volví a pedir. -Diego, no te irás hasta que me digas todo –sus ojos brillaban amenazantes-. ...
    ... Y, si no hablas, esto se pondrá peor. -¿Por qué quieres saber? ¿Qué harás? –pregunté. -Eso no te incumbe –respondió. -Sí, sí lo hace –contradije. -No te subleves, muchachito –advirtió-. Quiero saber para intercambiar unas palabritas con él. Y dejarle claro que, si vuelve a tocarte, se las verá conmigo. -No puedes hacer nada –temía que mi hermano pudiera correr peligro. -Pequeño, tengo dinero, puedo hacer todo –una sonrisa maliciosa me hizo temblar-. Ahora dime. No sé por qué lo defiendes. Mira cómo te dejó… ¿Te amenaza? -No –me apresuré a decir. -¿Entonces? –preguntó-. ¿Acaso te gustó? -… -nada salió de mi boca. Mi mirada cayó. -No lo puedo creer –sus ojos se abrieron y una carcajada burlona salió de sus labios-. Eres un puto guarro. ¿Eh? Te lo tenías escondido. Quién diría que alguien con semejante carita de angelito le gustara que lo trataran como una prostituta barata. Y yo que te traté con cariño. -No soy una prostituta barata –dije. -No, claro que no. Porque tú lo hiciste gratis. Eres incluso peor –en su pantalón algo comenzaba a crecer-. Será mejor que hables. O comenzaré a buscar tus límites. Y no creo que te guste. Di un paso hacia atrás y guardé silencio. Robert avanzó y me tomó del pelo, tirando de él hasta dejarme de rodillas. -¡Suéltame! –grité. -No –respondió. -Te acusaré –amenacé. -¿Y qué les dirás? ¿Que eres un puto vicioso? ¿Qué amas la verga y que te gusta rudo? Porque esas marcas serán difícil de explicar –dijo-. No puedes decir nada. No tienes pruebas. Nos ...
«12...456...11»