1. Una para todos (Segunda parte)


    Fecha: 01/07/2019, Categorías: Transexuales Autor: Mamaceando, Fuente: CuentoRelatos

    ... PERRITA?
    
    —siiii. Eres mi perra ahora… y de papá… y…
    
    —Solo tuya… CÓGEME! Soy tuya!
    
    —¡PUTA!
    
    De un movimiento la empinó, al parecer ese era el paisaje favorito de todos. Cuando la penetro, le tomó el pelo y la jalo.
    
    —Solo será esta vez…
    
    — Soy tu perrita… CÓGEME cuando quieras…
    
    La primera nalgada fue tibia, pensó que su hermana se enfadaría, a su esposa le molestaba mucho, la segunda sonó por toda la habitación y le dio confianza. Después perdió la cuenta, pero el enrojecimiento delas nalgas de su hermana indicaban que eran suficientes.
    
    —Te amo hermanita, eres hermosa.
    
    —¿voy a seguir siendo tu perrita?
    
    —Ya veremos…
    
    —Veremos... menso…
    
    Habían llegado al clímax, y ahora estaban abrasados, y besándose dulcemente. Luego de una sesión más corta, su hermano le embarró las nalgas de semen.
    
    Se bañaron y se vistieron llenándose de caricias, luego salieron tomados de la mano.
    
    —¿Y ahora también la traes a casa?
    
    —Solo fue hoy, andaba por la zona y aproveché para convivir con mi hermanita.
    
    La risa pícara de Fernanda hizo que a Don Antonio le hirviera la sangre, Juan Carlos se despidió sabiendo que su padre también usaba a su hermana como su puta. Un poco después llegó Daniel. Había estado parado en la estación del metro Villa de Cortez, vio el auto de su hermano entrar a un motel, le pareció una equivocación, no podía ser, tampoco lo de anoche, esperó a que saliera para comprobar que la acompañante era… su hermana Fernanda.
    
    Esa noche ...
    ... Daniel aguardó en la sala, su padre salió y caminaba por el pasillo, cuando la voz de Daniel lo hizo brincar.
    
    —¿A dónde vas?
    
    —¡PUTA MADRE ME VAS A MATAR DE UN SUSTO! Salí por… un poco de agua.
    
    —La cocina está del otro lado.
    
    —¡Ahora me vas a venir a decir dónde queda cada cosa en mi casa! Deberías de dormir, mañana tienes escuela.
    
    Con una molestia evidente, Don Antonio regresó a su habitación, luego Fernanda salió y caminó hasta la cocina con unos shorts que dejaban asomar sus nalgas.
    
    —¿Que tu no duermes?
    
    —Parece que nadie duerme aquí hermana.
    
    —Cuando abrió el refrigerador se agachó innecesariamente. El short se metió entre sus nalga y Daniel tragó saliva, la luz del refrigerador dejaba ver la silueta perfecta de Fernanda. Ese trasero causaba el mismo efecto en todos, la verga de Daniel se estaba poniendo dura. La vio caminar de regreso a su habitación y entonces él fue a la suya. En cuanto cerró para masturbase con la imagen de su hermana. Escucho pasos en el pasillo. Su padre no se daría por vencido.
    
    —¿Pensé que hoy no vendrías?
    
    —Tu pinche hermanito es un dolor de huevos chingao. ¿Qué pedo con el Carlos?
    
    —¿De qué?
    
    —No te hagas pendeja, ese no le hace favores a nadie, ¿y ahora pasa por ti y te trae?
    
    Mientras le reclamaba, le arrancó el short y después de escupirse sobre la verga la metió en su hija. Sin ninguna compasión entraba y salía de Fernanda bruscamente.
    
    —¿Pensé que eras mi puta?
    
    —¿Que insinúas haaa haaa! Despacio!
    
    —No soy ...