1. Mi nombre es Marlene y así fue como descubrí que me gustaba ser observada


    Fecha: 29/08/2019, Categorías: Grandes Series, Autor: Marlene.munoz.r, Fuente: CuentoRelatos

    ... unos desconocidos sucios y enfermos estaban mirándome y morboseandose conmigo ¡sin que yo me diera cuenta! inmediatamente iba a cerrar las cortinas y no le diría a nadie por la vergüenza.
    
    Bajé y terminé mis asuntos. Pronto regresé a la oficina y tomé mi lugar. Atendí el teléfono y envíe un correo urgente, pero no quitaba de mi mente que en cuanto apareciera el hombre de la ventana, cerraría las cortinas. Lo había decidido.
    
    Estuve así, atenta a que apareciera el hombre y nada aún. Había pasado ya más de media hora y no tenía indicios de aparecer de nuevo. De pronto me pregunté si habría escuchado bien y si tal vez no hablarían de mi. Fue entonces cuando empecé a fantasear con esa idea. Imaginaba que ya había aparecido y que no me había dado cuenta, que él y su compañero estaría gustosos de verme, pero sobre todo imaginaba a aquel trabajador por la noche haciendo de las suyas mientras miraba mi foto en su celular.
    
    Después pensaba fríamente y dado que no sucedía nada me preguntaba ¿porque me había excitado que un hombre me viera? ¿porque me había gustado que se refirieran a mí de esa manera? ¿porque me excitó imaginar que esos hombres se deleitaran con una fotografía mía? ¿porque me ponía así la idea de que un hombre se tocará viéndome? ¿porque?
    
    Comenzaba a ponerme nerviosa y más avocada a que apareciera el hombre que a mi trabajo y decidí olvidar el tema aquel definitivamente. ¿Qué me pasaba? porque me ponía a pensar en ello. Seguí en lo mío y me fui a por mi ...
    ... segundo café del día. Entré al baño de la oficina y por de entre la cortina me di cuenta que el hombre comenzaba a subir a ¡limpiar las ventas de mi piso! me estremecí por completo y empecé a sentirme nerviosa.
    
    ¡Cálmate! le dije a mi reflejo en el espejo. Y casi inmediatamente me contestó en el pensamiento: Estas excitada y lo sabes, es una travesura, ni tú te habías dado cuenta, además nadie más que tú lo sabe. Nadie más que tú lo sabe... reboto esa frase en mi cabeza como un eco de voz.
    
    Así que me aferre a eso: "Nadie más que yo lo sabe" "me gusta de una manera extraña, todo esto", "vamos a seguirle el juego".
    
    Me vi al espejo y me animé. Me acomodé el vestido. Me quité el short de lycra y me di cuenta de lo que confirmaría mi excitación, estaba algo húmeda, hacia tanto que no me sentía así. Subí un poco el fondo del vestido, doblándolo solo un poco y asegurándolo en mis bragas, por la cintura.
    
    Salí del baño apresurándome a tomar la taza de café y pasando desapercibida a mi escritorio en recepción. Solo yo sabía todo lo que ocurría en un día normal de trabajo. De pronto por el reflejo del monitor vi movimientos en la ventana y era él. El trabajador.
    
    Sin mostrarme alerta de nada, como si todo estuviera transcurriendo normal, disimulé seguir en lo mío. Junté las piernas y subí un poquito el vestido, y lentamente me giré hacia un costado, tomé unas hojas al azar e hice como que leía mientras veía lo que sucedía por el reflejo del monitor.
    
    El hombre tomó el celular ...