-
Dos vergas para mi solita, que no se entere mi novio
Fecha: 06/10/2019, Categorías: Gays Autor: Dulce Fuego, Fuente: CuentoRelatos
... tetas, yo me sentí cachondísima y dejé de reprimir el impulso que sentía desde hacía horas de saltarle encima, así que me monté sobre sus piernas, de frente a él con mis piernas abiertas a los costados y envolví su boca con mis labios, a lo que Andrés respondió acariciándome las nalgas sobre el pantalón. Mientras nos besábamos, terminé de desabotonar mi blusa y me quité el sujetador; Andrés se agachó para que su lengua jugara en mis pezones, mientras, desabroché difícilmente el botón de mi ajustado pantalón; cuando finalmente lo logré, me recosté de lado para quitármelo y Andrés aprovechó para eludir mis braguitas e introducir su dedo medio en mi cavidad, que a esas alturas estaba muy húmeda y hambrienta. -No quiero tus dedos, quiero esto-. Le dije a mi amante acercando mi mano a su entrepierna para sentir su pene erecto bajo la ropa. -Quiero que me des verga-. Dicho esto, me incorporé hasta quedar sentada al lado de Andrés y mientras lo volvía a besar y él me dedeaba, mis manos liberaron su miembro del encierro de su pantalón. Luego, me monté de nuevo con las piernas bien abiertas a cada costado de Andrés, y en ese momento maldije para mis adentros, pues recordé que Ricardo había guardado en su cartera los condones que llevábamos para usarlos aquella noche, y casi al mismo tiempo Andrés separaba su boca de la mía para decirme que me detuviera, que no traía condones, pero que si yo quería, podía ir por unos a su casa. -Pero vas a tardar mucho, mi amor, y quién sabe si el ...
... chófer te deje subir otra vez, déjame pensar en algo- Le respondí, repasando mentalmente a toda velocidad cada opción que imaginaba para conseguir un condón lo antes posible. Pero tener ese delicioso miembro latiendo enardecido entre mis manos, solo me dejaba pensar en lo rico que sería tenerlo bien adentro, cogiéndome duro. Andrés continuaba acariciándome las tetas bajo la blusa abierta y volviéndome loca cada vez que una de sus manos bajaba a mi vagina para introducir un par de dedos en mi coño. Definitivamente no podía pensar en ese momento, solo quería que Andrés me cogiera, así que acomodé su glande en mi entradita y sentí que mi vagina estaba casi escurriendo sus jugos -No importa, mi amor, ya no aguanto, métemelo así, entiérrame tu verga... aquí- Y bajé mi cadera despacio y me ensarté entero el miembro de aquél muchacho hasta sentir sus testículos chocando contra mi. Hacía unos meses desde que alguien me había penetrado sin usar condón; la última vez que me habían cogido sin protección había sido un profesor de mi preparatoria, cuando me citó junto con otros compañeros en su casa para estudiar química antes de presentar nuestro último examen de su materia y cuando al final de aquella tarde, nos quedamos solos él y yo, terminé siendo sometida, con la verga de mi profesor profanando mi cavidad vaginal y luego, dándome mi primera experiencia anal. Así que sentir de nuevo el roce de la piel desnuda de una verga taladrando mi panochita, fue algo que disfruté mucho y me ...