Primera vez de campeonato
Fecha: 06/10/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Angela aparecía de nuevo, estamos los dos sentados en la sala de cine del pueblo con motivo de alguna chorrada del instituto, un corto didáctico o algún vídeo de concienciación del medio ambiente. Aunque mirando, lo veo borroso, no es importante y estoy más pendiente de la presencia, justo en el asiento de la derecha, de la compañera de clase más despampanante. A pesar de nuestros 15 años, la tía es un cañón. Todo a mi alrededor es confuso, intento ser consciente de lo que hay alrededor, ¿profesores, compañeros? No lo tengo claro, solo percibo que ella me mira con cara pícara y yo no soy capaz de reaccionar, me quedo quieto y rojo como un tomate, siempre me pasa, mientras mi miembro empieza a ponerse duro, no soy capaz de contenerlo. De reojo ella nota mi incipiente bulto y empieza a mover la mano hacia él. Lo va a hacer, me la va a tocar, por fin una mano distinta a la mía va a tocar mi necesitado rabo. Quiero moverme pero no puedo, sus movimientos se han ralentizado, el entorno se vuelve extraño... De pronto, oscuridad, una sensación de no saber que ha pasado, un techo blanco, una lámpara infantil, estoy en mi cama.
El pijama, retorcido, me molesta, me muevo y noto humedad. No puede ser, me ha vuelto a pasar, he manchado el pijama, me he corrido en sueños y de nuevo ha aparecido Angela, ¿por qué me pondrá tanto esa chica? Siempre que llevo unos días sin darle trabajo a mi herramienta, tengo un sueño parecido, la mayoría de las veces, aparece la misma compañera.
Me ...
... levanto con desgana, como siempre, la adolescencia me quita las ganas y el interés por todo que no sea las mujeres, bueno, para ser justo, las mujeres y el fútbol.
- Pedro, tienes preparado el vaso en la cocina, no olvides recogerlo y dejarlo en el fregadero...
- Si mamá, con agua, para que luego cueste menos fregarlo.
- ¡Vaya humor a primera hora de la mañana! Espero que para la comida tengas mejor carácter, he preparado vuestra comida favorita.
- Gracias madre, espero que los profesores nos dejen salir hoy antes siendo el último día del curso.
Mi madre es abogada, tiene unos 44 años muy bien llevados, ya que sin ser una mujer de bandera, es muy atractiva, con unas medidas proporcionadas y una piel tersa, morena y de ojos claros.
No hacia falta que llegase la hora de la comida, acababa de recordar que hoy empezaba el verano, podía estar tirado en la cama sin hacer nada. Nada me gustaba más, bueno, casi nada.
Las clases, distintas a todas las demás, son amenas y nos vamos pronto a casa, no sin antes guardar en la retina la imagen de mi tutora de ese año. Profesora de inglés, un poco hippie pero con un escote envidiable, donde perderse y disfrutar de las dos grandes esferas que la naturaleza le ha dado. La guinda la ponía su cara, era guapa, de ojos oscuros y gruesos labios, con una cara de viciosa que no se la podía quitar nadie. El hecho de que fuese verano lo hacía más morboso, pues se formaba una humedad en su canalillo que hacía que desease rozar mi ...