Patas arriba (XIII): Esqueletos en el armario
Fecha: 21/10/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anderson, Fuente: CuentoRelatos
... reconocerle como un Sabater ni de reintegrarle entre nosotros, por lo que el lugar de la tumba de mi esposa le será revelado por medio de los abogados de la familia y rogamos que no se haga presente en este sitio, ya que no queremos tener que sumar a lo difícil del momento que pasamos la vergüenza de tener que llamar a los Mossos d’Esquadra para que lo saquen por invadir nuestra casa.
Sin afecto y esperando no tener que volver a comunicarme con usted,
Andreu Sabater
Vamos, que aprovecha la muerte de mamá para tratarme como una mierda, si es que mi padre es único y es evidente que no se quiere más que a sí mismo, pero el tipo es idiota, no necesito que ningún abogado me diga dónde enterraron a mamá, para eso está Google que lo sabe todo de todos, o me voy a la Generalitat y pregunto, tan sencillo como eso.
¿Y ahora cómo me quito este cabreo del quince que me provocó el gilipollas de mi padre? Estaba caminando de un lado a otro del piso, tenía ganas de golpear algo, pero todo estaba nuevo y no quería dañar nada, justo en ese momento escuché un sonidito familiar, era mi móvil y aunque quería destrozarlo, lo que hice fue mirar lo que había provocado la alarma y era un mensaje, enviado por la única persona que podía alegrarme el momento: Cami.
Por lo visto este chico que todavía no era nada mío, pero que yo quería que lo fuera, había decidido que de todas las personas con quienes podía pasar la tarde hablando, yo era su mejor opción y logró quitarme el cabreo, ...
... aunque no le conté nada, me contagió su optimismo y al final de la tarde casi había olvidado esa carta, casi.
Pero Cami se durmió y la realidad cayó sobre mí como una losa: mi madre está muerta y no sólo eso, sino que no me pude despedir y ahora en mi conciencia queda que puede que me odiara en ese momento, puede que quisiera hablar conmigo y solucionarlo, nunca lo sabré, además, la extrañaré mucho, después de todo, era mi madre y su muerte me parte el alma, pero tendré que aprender a vivir con esto.
Cami
Bueno, una semana aquí metido y ya hoy me puedo ir a casa, la ventaja es que mi tío Tavo se encargará de que todo vaya bien aunque no esté en el hospital, él me dijo que generalmente, después de una herida como la mía, la gente se queda un mes en el hospital, pero que en mi caso bastó con que él le prometiera a la aseguradora cuidarme de gratis y me dejaron irme a casa, cosa que no dudé en hacer.
Mi tío dice que estoy muy bien y que me conviene caminar un poco, así que me autorizó salir a dar pequeños paseos, pero con una condición, no debía salir solo, porque si me sentía mal él necesitaba que alguien me pudiera llevar a casa y que de inmediato le llamase, además murmuró entre dientes algo acerca de que no podía salir solo de todos modos, no sé de lo que habla, tendré que preguntarles a los chicos, tal vez ellos sepan algo.
En una de tantas salidas le toqué el tema a Iván y Ricardo, quienes me acompañaban y, a diferencia de los demás, ellos me miraron sorprendidos ...