Un tío con suerte - mi sobrina Ivanna
Fecha: 16/09/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: Fernando X, Fuente: CuentoRelatos
... sola, me comento que no se la estaba pasando tan bien como sus amigos, y que les había dejado las llaves para que regresaran cuando quisieran, me dijo que iba a bajar a la alberca y aprovechar los minutos que estaría abierta todavía y que le gustaría que la acompañara, por lo que nos pusimos nuestros trajes y bajamos a una alberca totalmente vacía, nos metimos al agua y ella se puso en mi espalda, para montarme y dejarme que la llevara a una esquina, el agua estaba tibia pero su cuerpo estaba hirviendo, en cuanto llegamos a la esquina me volteo y se puso de frente pegándose coquetamente a mi cuerpo, que de inmediato reacciono, mi sobrina me abrazaba con sus piernas y ponía su panocha sobre mi erecto palo, la abrase tomándola de sus nalgas y le dije que estábamos jugando con fuego, ella se metió por completo al agua y aprovechando que estábamos en la parte más oscura, desabrocho y bajo mi calzón, dejando libre y totalmente parada mi verga, al salir a tomar aire, y abrazarme nuevamente con sus piernas, le dije que no era justo que solo yo estuviera desnudo, por lo que afloje y quite su corpiño para después sumergirme y quitarle también su bikini. Ivanna me dio la espalda y acomodo entre sus nalgas mi falo, cuidando siempre de no ensartarse, después se giró y coquetamente acomodo su rajita justo en el glande, solo era cuestión de tomarla y empujarla para lograr metérsela, pero justo en ese momento, me dijo que era virgen, que deseaba con toda su alma, que fuera yo quien le ...
... quitara esa condición, pero que quería que fuera un momento único y que prefería que fuera en mi cama y no en esa alberca, buscando con su boca la mía, para darme un beso.
Nos pusimos nuevamente nuestras prendas y subimos al departamento justo cuando el vigilante venía a avisarnos de que iba a cerrar el área de la alberca, aprovechamos el elevador, para besarnos apasionadamente, al llegar, primeramente nos bañamos, momento que aprovechamos para vernos por primera vez desnudos el uno al otro, aproveche para contemplarle sus pequeños senos y sus (en esos momentos) rojas tetitas, su panochita virgen, depilada perfectamente a la forma de su bikini, mientras la enjabonaba, aprovechaba para sobar todo su cuerpo y repegarle mi miembro tanto en su culito como en su vagina, al igual que ella aprovechaba para agarrarse firmemente de él cada vez que podía. Al salir del baño, la acosté tiernamente en la cama y la empecé a besar en su cuello y oídos, sobaba sus pezones y acariciaba sus piernas y nalgas, ella se dejaba hacer dócilmente, únicamente disfrutaba del momento, me entregaba su boca para que también le besara, no quería mancillar el momento obligándola a nada, poco a poco, fue permitiendo llegar más lejos, sus gemidos de placer me daban la pauta, bajar mi boca a su conchita para besarla e insertar mi lengua en su clítoris y su rajita, sus manos sostenían mi cabeza, para evitar que la separara de su sexo ardiente, exigiendo que cada vez más, mi lengua la violara, así le vino su ...