Negación - Capítulo 7
Fecha: 09/02/2020,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Gonza-Neg, Fuente: CuentoRelatos
... orientación sexual. Siempre le he temido al rechazo, y aunque las personas dicen haber “evolucionado”, el colectivo social aún juzga.
El cuarto era sorprendentemente amplio –pudo haber sido peor-. Al menos podíamos caminar sin chocar. Lo que llamó mi atención fueron los escasos mobiliarios. Había una cama central, dos veladores a sus costados, una encimera a la derecha, un armario en la izquierda, y al lado de éste, una puerta que daba a un baño pequeño. Sobre la encimera había un pequeño espejo, y sólo eso servía de decoración para la habitación.
- Es… - traté de encontrar la palabra correcta.
- Discreta – me dijo, pasando por mi costado y saltando hacía la cama. Se giró y me quedó mirando. Adoptó una posición bastante sexy ahí, apoyado en un solo brazo, las piernas cruzadas. Sólo en ese momento me fijé en su atuendo, vaqueros, camisa blanca abotonada hasta el pecho, y una cazadora negra. – Cierra la puerta – me indicó.
Me había parado en el arco de la entrada. Mirando el espectáculo que era él – podrías gustarme – pensé – pero eres un maldito hijo de puta -. Recordé entonces, dónde estaba y el motivo por el que me encontraba aquí. Un calor comenzó a recorrer mi cuerpo desde la boca de mi estómago. Cerré los ojos y me giré para cerrar la puerta, dándole la espalda. Me quedé ahí petrificado, con la cerradura firmemente atrapada en mi mano. Comencé a respirar lentamente llamándome a la tranquilidad.
- Quítate la ropa – su voz ronca me llegó cargada de deseo. Me ...
... giré, seguía recostado en la cama, una sonrisa había aparecido en sus labios, desafiándome. Desnudarme, esa es la parte fácil amigo - pensé.
Puse mis manos en el dobladillo de la sudadera, la subí lentamente, dejando al descubierto la piel de mi abdomen, iba a mitad de camino por mi pecho cuando comencé a temblar. Apuré el movimiento, las saqué por mi cabeza y la tiré a mis pies. Esperé.
- Quítate toda la ropa – me exigió, dirigiendo su mirada al buzo.
Suspire, y bajé los pantalones rápidamente, di un paso hacia el costado para liberar la prenda de mis pies, en conjunto con las sucias zapatillas. Me felicité mentalmente por haber elegido sólo dos prendas de vestir, y no capas interminables de ropa, que habrían hecho esta parte del proceso eterna.
Estaba desnudo y el me observaba. En su mirada notaba un sinfín de emociones vagando, las principales como siempre, eran el odio, y el asco. Descubrí la lástima que me mostró cuando nos encontramos en el paradero, vagando ahí, y algo más, un sentimiento con el que luchaba, había deseo. Bajo la apreciación de sus ojos comencé a sentirme “desnudo” por primera vez. Sentía que estaba viendo a través de mí, veía mi alma, y ese lugar era sólo mío. Me sentí incomodo, y quise cubrirme. Pareció darse cuenta y apartó la mirada.
- Te quiero contra esa pared – me indico con la barbilla, se trataba de un espacio vacío cerca del espejo, a la derecha de la encimera.
Me dirigí al lugar que señaló, cuando estuve allí lo miré, como ...