La quinceañera y el profesor "Sargento"
Fecha: 18/02/2020,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... sigues haciéndomelo así, se me saldrá la leche. Tu boquita es tan poderosa. Me levanta y me besa con mucha pasión, me acuesta en la cama, me abre las piernas despacio, me chupa un poco y empieza a meter un dedo en mi vagina, siento tan rico mientras el mete y saca su dedo del medio lentamente y sin lastimarme, luego se pone un condón, le pone un poco de lubricante y empieza a acariciar mi vagina con su pene. Me pone a mil todo eso y se lo demuestro abriendo más mis piernas; él se da cuenta de eso y comienza a penetrarme muy lento, con suavidad para no lastimarme, pues él comprendía que era mi primera vez y quería que todo saliera bien. Logra penetrarme, siento como me penetra y me gusta esa sensación, empieza a moverse y mientras lo hace, yo empiezo a gemir despacio, sigue moviéndose y yo no dejo de gemir, poco a poco se empieza a mover más rápido y yo empiezo a gritar más. Se empieza a mover tan fuerte que el placer aumenta en mí. Yo: -Mmm… ¡Sí!, me gusta como lo hace. Siga así. Él obedece la orden y se sigue moviendo. Me dice las palabras más dulces y entrecortadas por la excitación que sentía y que le provocaba mis gemidos. Profe ...
... Sargento: - Huyyy… Que rico es tenerte chiquita, deliciosa mmm. Yo ya no aguanto y siento que voy a correrme, él se mueve más rápido, cuando de pronto; tengo un fuerte orgasmo y el profe, al oírme gritar, se corre también. Cuando termina, me besa mis labios y se recuesta en mí. Me sigue besando, yo lo beso con mucha pasión; pues era la primera vez con un hombre de verdad y que me enseñó todo lo que sabía sobre el sexo. Me trató con mucho amor, y de hecho, sentí mucho amor mientras me lo hacía y me dijo: Profe Sargento: - Soy tu primer regalo de cumpleaños, y soy tu primer hombre. Vas a ser mi bebé, mi preciosa quinceañera. ¡Estás muy hermosa! Yo: - Usted es un gran hombre, y valla hombre, ¡Que guapo es usted!, Gracias por hacer mi deseo realidad. Profe Sargento: - Eres mía, y yo soy tuyo. Porque lo vamos a repetir de nuevo y muchas veces, ¿Verdad? ¿Me lo prometes? Yo: - ¡sí!, se lo prometo. Seguimos así hasta las 11 de la noche. Me llevó a mi casa. Me acompañó en mi fiesta de XV años que me organizaron mis padres. Bailó el vals conmigo y al oído me dijo: Prof. Sargento: - ¡Felicidades! Mañana te espera otra sorpresa… Mi hermosa Quinceañera.