El Profesor (Final)
Fecha: 17/03/2020,
Categorías:
Gays
Autor: angelmatsson, Fuente: SexoSinTabues
... forma muy intensa alrededor de mi ano, arrancándome suspiros de placer. Me derretí cuando sus dientes se incrustaron en mi carne aledaña a esa zona tan erógena, para luego ir subiendo dando leves mordidas y succiones. Pronto sentí todo el surco y parte de mis nalgas, húmedas debido a toda la saliva que había dejado Rocco en su juego. Al cabo de un rato, comenzó a suceder lo que llevaba mucho tiempo esperando. Lentamente y con timidez un dedo fue haciéndose presente. Tenía su glande en mi boca cuando Rocco empezó a introducir su dedo en mi interior. Gemí contra su verga. Sentí incómodo al principio debido a que hacía mucho tiempo que no estaba en ese tipo de situaciones. Prefería ser el activo, ya que tenía un culo muy estrecho por lo que me era bastante doloroso, además de que era muy propenso de sufrir algún tipo de lesión. Es por ese motivo que no tenía sexo anal desde que había terminado con mi primer novio, que fue quien me desvirgó. Era gracioso porque mis amigos pensaban que mi ex era el activo, cuando era yo. Todo eso debido a que él era más extrovertido y de carácter fuerte, mientras que yo era un poco más tímido y retraído. Pero se equivocaban, porque era yo quien le taladraba el culo. Al principio no fue problema, pues él decía que comprendía los motivos por los cuales yo no quería ser pasivo, sobre todo considerando que tenía una verga bastante gruesa. Pero con el tiempo fue cambiando de parecer hasta que no aguantó y terminó por engañarme con alguien más. Estaba ...
... en todo su derecho de terminar conmigo si no estaba de acuerdo con nuestra modalidad de pareja, pero ese no era motivo para engañarme y destruirme de esa manera. De todas formas, igual después venía arrepentido donde mí, como ese día en la plaza. En fin. El trabajo de Rocco era muy bueno y las sensaciones que recorrían mi cuerpo eran grandiosas. Cuando introdujo dos dedos comencé a ponerme un poco nervioso. Había quedado con un pequeño trauma debido a mi estrechez, y temía que pudiera hacerme daño. Pero como lo que estaba sintiendo era tan agradable, decidí por colocarme en una mejor posición para hacerle más fácil el trabajo. Fue así que decidí ponerme en cuatro sobre la cama, con el pecho contra la cama y con el culo bien parado para él. Apenas vio mi ano ante él, introdujo su lengua en mi interior. Un gemido profundo escapó por mi boca, acompañado de un escalofrío que erizó los vellos de mi cuerpo. Separó mis piernas y metió su mano entre ellas para tomar mi verga y comenzar a masturbarme. Con su otra mano fue metiendo sus dedos, girándolos y abriéndolos, haciéndome babear por el gusto. El tercer dedo entró con dificultad, entregándome la sensación de estar lleno. Rocco sacaba sus dedos y los reemplazaba por su lengua, para luego volver a meterlos y así repetir el ciclo. Era magnífico su nivel de destreza. En menos tiempo del que pensé, ya estaba listo para que Rocco estuviera dentro de mí. No sin antes decirle sobre mi problema y aconsejándole tener un poco de cuidado. ...