Mi obsesión fue un chico de 16 años, fui su perrita
Fecha: 10/04/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... que al otro día, sentí un cargo de conciencia, un arrepentimiento de todo esto, porque me podría traer problemas graves si algo se supiera. Pero Nelson regresó a su casa, no sin antes darme un beso de despedida en los labios. No se como consiguió mi número del móvil, posiblemente mi hijo. Me llamaba de vez en cuando o chateaba conmigo. Y volvío a suceder. Mi hijo y mi marido irían a ver un partido de futbol a una ciudad cercana, pero dormirían en un hotel y saldrían al otro día de regreso. En el chat se lo conté a Nelson, quien me dijo que pediría permiso de ir a dormir a mi casa, diciéndole a sus papás que allí estaría mi hijo, eran mentiras, solo estaríamos él y yo. De entrada, ahora con iluminación, lo hicimos en la sala, me desnudé frente a él, vi su paquete inflarse en sus pantalones. Lo desvestí y le mamé su verga hasta dejarla como me gusta, empalmada y durísima. No pude esperar y me senté sobre su verga, lo monté y me la metí hasta que desapareció en mi panocha mojada. Le ofrecí mis tetas y le dije –muerdemelas-, el chico me chupó y me mordió los pezones, hasta hacerme gemir de pasión. No quería que terminara pronto. Asi que me desmonté y acostándome en el sofá grande, le pedí que me lamiera todo el cuerpo, el chico abrió los ojos y me comenzó a lamer como si fuera un perrito, inició lamiéndome los dedos de los pies, los chupó uno por uno, luego mis pantorrillas, las rodillas, pasó la lengua a mis muslos, la entrepierna, me hizo vibrar de pasión, lamió mi rajita, ...
... subió a mi vientre, mamó mis tetas y llegó a mi cuello y mi boca. Luego aún insatisfecho, me hizo señas para que me diera vuelta y comenzó de nuevo, mi cuello lo lamió, pasó a mi espalda, me dio algo de cosquillas, pero lo húmedo y caliente de su lengua me ponía loca, bajó a mis nalgas, las chupó mucho, las abrió con sus manos y divisó el ojo de mi culito, se lo comió todo, su lengua parecía succionar y raspar mi ano y no me pude contener y tuve un orgasmo increíble, nunca me había pasado, acabar solo con un chupada de culito, ni mi marido. Ahora quería y necesitaba cogérmelo. Lo puse acostado boca arriba y me subí de nuevo sobre él, me enterré su verga que goteaba liquido preseminal, lo monté, lo cabalgue, le di mis tetas para que las mordiera y volví a tener otro orgasmo brutal, el chico se vino dentro de mi, estaba vez su cantidad fue grande, que me salía por los labios de mi vagina. Luego lo tomé de la mano y lo llevé a la ducha de mi recamara, los dos estamos sudados, en la regadera nos besamos como si fueramos enamorados, la verga se le fue parando de nuevo y poniéndose dura, me acosté en el piso de la ducha y le pedí que me poseyera, el se puso entre mis muslos y me penetró de forma rica, nos besamos y ahora la cogida fue lenta, me mamaba los senos y el cuello, el chico no era un completo aficionado, tenía su experiencia, que luego me confesaría, pues una prima mayor que él se lo había cogido y entrenado por casi un año. En el piso de la ducha, con el agua caliente ...