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Maduras Anónimas (Cap. 4.5)
Fecha: 30/05/2020, Categorías: Incesto Autor: Incest_Lover, Fuente: CuentoRelatos
... saliva. Abrí los ojos y descubrí que los muy guarros ya estaban follando nuevamente. Esta vez el chico estaba acostado en la cama mientras Vicky montaba su erecto miembro. Las enormes tetas de mi amiga rebotaban descontroladas mientras cabalgaba a su amante. El chico llevo sus manos hasta aquellos globos de carne y los atrapo, amasándolos juntos y haciéndola gemir. Acompañándolos en su placer lleve el juguete hasta mi coño donde lo introduje hasta el fondo y pronto ya estaba gimiendo junto a ellos. Perdí la cuenta de cuantas veces ya me había corrido observándolos, solo me concentraba en disfrutar y alcanzar un nuevo orgasmo. En la pantalla vi que Vicky se retiraba de la polla del joven y haciéndolo sentarse en el borde de la cama se agachaba otra vez para darle otra mamada. Pero esta vez fue algo diferente pues tomando sus grandes pechos los coloco sobre la polla del chico y la hizo desaparecer entre ellos. Comenzó a pajear al joven usando sus enormes pecho y la punta del pene podía verse salir de entre ellos por ratos donde ella extendía su lengua para lamer su morada cabeza hasta que de improviso el chico lanzo un gemido y chorros de leche salieron disparados de su verga, bañando las tetas y rostro de mi amiga quien como toda una guarra lo recibió con deleite. Al ver como esparcía su semilla aquel erecto miembro me hizo tener un orgasmo final, deseando ser yo quien recibiera esa increíble corrida. Cubierta de semen, Vicky se dirigió a la cámara con ...
... una enorme sonrisa en el rostro. -Espero que les haya gustado, mis amores, yo lo disfruté muchísimo. Hasta la próxima y háganse una paja pensando en mi.- dijo despidiéndose con un beso a la cámara. La transmisión término, la pantalla se quedó en negro y volví a la realidad. Aún tenía el consolador metido en mi coño y el piso estaba hecho un asco con todos los jugos que habían chorreado de mi acalorada sesión. Recordé que mi hijo podría llegar en cualquier momento y rápidamente me puse de pie, lave el consolador y lo regrese a su lugar secreto. Me puse una bata y empecé a limpiar todo el desorden que había causado. Logre terminar al mismo tiempo que mi hijo entraba por la puerta pero aún quedaba un poco de olor a sexo por el lugar, esperaba que él no lo notara. Me saludo un tanto nervioso y se dirigió con rapidez a su habitación. Su comportamiento se me hizo extraño hasta que vi el motivo de su incomodidad; con toda la faena mi bata se había abierto dejando mis senos y coño al aire. Totalmente apenada la cerré rápidamente. Nuevamente me fue difícil conciliar el sueño esa noche. No podía negar que todo lo que había visto había sido muy excitante, recordé la polla de aquel joven, la energía con la que follaba a mi amiga, su resistencia para aguantar varios encuentros, su compromiso a seguir con el juego y esos chorros de leche que salían disparados de esa magnífica verga. Recordé también la cara de placer y satisfacción de Victoria al experimentar orgasmo tras ...